Todos estos datos, de por sí preocupantes, dicen poco y nada si se piensa en todo lo que comienza a saberse y decirse respecto de quien sería su socio que, obvio, no es Carlos Martín Bellafiore que abandonó la UTE.
No pagó el Canon de $ 50.000 ni el porcentaje del Fondo de Discapacidad, que alcanza la friolera de medio millón de pesos. Tan preocupante como esto es el mutis oficial. Este diario se cansó de llamar a la responsable del Ente para contar con la palabra oficial y no tuvimos suerte.
El carnaval es una hermosa fiesta popular de la que disfruta mucha gente, quizá tanta como la que quisiera y no puede por el costo de la entrada. En este sentido entonces no es justo que los miles que quedan fuera de la fiesta deban ayudar a subvencionar con dineros públicos un negocio privado y millonario. Esto parece ser solo el comienzo de lo que amenaza transformarse en un culebrón que dará que hablar, porque hay personajes a los que el pasado los condena.
LOS PREMIOS…
A pesar del tiempo transcurrido (un mes) el premio no fue pagado y DIARIOJUNIO pudo saber que, el pasado 26 se presentó un reclamo tipo ultimátum para que el mismo se hiciera efectivo. Se trata de una Carta Documento firmada por la titular de la comparsa Ráfaga, Victoria Haidee Duimovich que dice “intimo al Ente a dar cumplimiento al pago del segundo premio”. A su vez, le dió un plazo de 48 hs que ya se cumplió sin respuesta.
Este martes se conoció que la comparsa Emperatriz hizo una presentación. Ese hecho reciente, ahora, es utilizado como argumento para no pagar los premios.
El dato no es menor. Este espectáculo se puede hacer gracias al esfuerzo y aporte económico de las comparsas y sus integrantes. Solo para tener una idea, DIARIOJUNIO consultó a varios de los que hacen posible este mega-espectáculo : las comparsas. Un traje de los destacados, cuestan alrededor de $ 25.000 y en esto, números más, números menos, coincidieron todos.
Para quienes no lo saben estamos hablando de alrededor de 1500 personas que integran las 4 cuatro comparsas, entre bailarines, batucadas, músicos. En otras palabras, una movida imponente que debe respetarse y cuidarse. Es un valor social y cultural que hace más atractiva la ciudad, genera turismo, ingresos y da un vuelo que les sirve a todos.
O sea, ponen el esfuerzo, el baile, el dinero, la destreza, la alegría, las hinchadas y, al cerrar el telón, son los últimos orejones del tarro. No es justo.
¿ UN GRAN NEGOCIO ?
Esta situación despierta otros interrogantes y la aparición de comentarios que interpelan acerca de este espectáculo que representa un millonario negocio ¿ para quién es ese negocio ? ; ¿ quién se lleva la parte grande de la torta ?.
Mientras se desarrollaba el mismo, el público protestaba por entender que el precio de las entradas era excesivo. La protesta, a la que este diario le dio cabida, es solo un aspecto, que puede ser razonable o no, no lo sabemos, apenas lo intuimos.
Lo que es cierto es que es una movida llena de pueblo que alienta las fotos y los aplausos. Nada mal para un año electoral. Quizá sabedor de esto, Medrano amenazó el año pasado con no organizar la Edición 2015 si no le daban los $ 2 millones que supuestamente había perdido en los anteriores. Ni nosotros estamos en condiciones de asegurar que esos dichos son falsos, ni él mostró nada que puedan probar tales afirmaciones.
Lo que DIARIOJUNIO sabe es que al menos una parte de ese dinero salió de la Caja Mixta municipal de Préstamos y que el millonario monto aún no fue recuperado.
Para aportar al debate alguna aproximación DIARIOJUNIO sacó algunas cuentas luego de varias consultas. Hicimos un cálculo en base a un número aproximado de asistentes al espectáculo que, para no errar, lo ubicamos en 8.500 personas promedio en cada una de las 6 noches. Por las dudas vale decir que hubo noches que se superaron las 10.000 personas y quedó gente sin poder ingresar.
Al mismo tiempo calculamos un total de 400 mesas en el sector Vip, a razón de 100 mesas por fila con sus respectivos valores, esto es, 1º fila $ 650, 2º fila 550, 3º fila 450 y 4º fila 400.
Todo esto nos da una cifra que supera los $ 6.000.000. Entre los gastos, aparecen los premios que suman casi $ 2.000.000.- más todo el resto que, imaginamos, no es poco (seguridad, sonido, etc), en fin, enormes gastos, pero ¿cuántos?, podría ser fácilmente cuantificable si se dieran a conocer, si fuera más transparente. Pero claro, es un negocio privado y el privado no tiene porqué poner esa información a disposición del público.
La situación es por lo menos extraña pues en materia de recursos falta decir que durante las 6 noches, las cantinas (de lo que pida, choris, bebidas caras y baratas, sándwiches, etc.) funcionaron a full y el monto recaudado incalculable… y secreto (al menos hasta ahora), el nombre del dueño real de esa mina de oro temporaria ¿Quién se llevó todo ese dinero?.
Si todo estuviese en regla, o sea, si las comparsas ya tuvieran en su poder el dinero del premio, si la municipalidad como concedente se hubiera llevado lo suyo y los cheques emitidos no fueran “voladores”, esta nota no tendría razón de ser.
