Lavrov se refirió a los "juegos geopolíticos de EE.UU." y lo ejemplificó con el caso ucraniano, en el cual el actual conflicto agravó la relación Rusia-UE, provocó pérdidas multimillonarias a empresarios europeos y mientras tanto Washington "no sufre daño alguno".
Incluso, en sus declaraciones fue más allá y dijo que EE.UU. "se aprovecha de la situación para provocar actividades militares peligrosas cerca de las fronteras rusas e impulsar una carrera armamentista en nuestra vecindad, donde esperábamos que no hubiera lugar para una nueva Guerra Fría".
Por primera vez en 10 años el canciller ruso visita Portugal.