Verón sostuvo que en la audiencia no llegaron a ningún acuerdo aunque admitió que se solucionó una parte del conflicto debido a que Baggio accedió a reincorporar a los empleados de una empresa distribuidora de Buenos Aires que había despedido. No obstante, en los restantes puntos de discusión “no hemos llegado a un entendimiento”.
El conflicto no comprende sólo a las plantas de Gualeguaychú y Concordia. Abarca a todas las empresas que realizan el servicio de transporte a Baggio en todo el país. “Cuando se firma un convenio con empresas que tienen establecimientos en distintas provincias, se firma a través de la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros y es para todo el país”, señaló el secretario adjunto.
Baggio no quiere hacerse cargo de la responsabilidad solidaria. “Usted no puede contratar a una empresa que tenga a los trabajadores mal inscriptos o no inscriptos en documentación laboral, como en este caso”, explicó. “A lo mejor por eso se niega a brindarnos la información”, añadió Verón.
En Camioneros entienden que, de no hacerse cargo de la responsabilidad solidaria, corresponde investigar la evasión de las empresas que realizan el transporte ante el incumplimiento del convenio colectivo a los trabajadores. “Queremos la información de todo el movimiento por el tiempo no prescripto para reclamar las diferencias salariales de esos trabajadores por un período de dos años”, indicó Verón.
El secretario adjunto remarcó que el gremio siempre está predispuesto al diálogo para mantener “la paz social”. “Quiero hacer la salvedad porque después se malinterpreta la cosa. Nosotros no llegamos a un conflicto por el conflicto mismo: llegamos cuando se han agotado ya un montón de situaciones de diálogo”, aclaró.
No obstante, mañana analizarán la posibilidad de volver a instalarse frente a las fábricas tal como lo hicieron el mes pasado. De cualquier forma: “la metodología a implementar no sé si va a ser la misma o puede cambiar”, dijo.
Esta tarde, los camioneros que estaban apostados frente a Baggio comentaron a DIARIOJUNIO que desconocían lo que iba a pasar mañana. No obstante admitieron que había movimientos inusuales que daban la impresión de que había apuro por sacar toda la producción de hoy para mañana.
Uno de los camioneros dijo que el 80 % de los transportistas son dueños de su propio camión y que eran pocos los choferes que realizaban tareas para las empresas contratadas. “A nosotros no nos dicen nada”, dijo. Además recordó que el sindicato, cuando se instaló frente a la fábrica, no impedía el acceso a los camiones. “Estaban ahí y te decían que ellos estaban haciendo una protesta y te invitaban a solidarizarte. Yo adhería obvio”, explicó, y luego admitió: “además quien me garantiza que si entro no le termina pasando algo al camión”.
