Luego de su arribo a Argentina, Urribarri participó de una primer movida política en Concordia invitado NO por la dirigencia pejotista, sino por una agrupación artiguista y no le fue mal, llenó el salón y fue aplaudido por ese auditorio militante.
Al parecer la experiencia de Concordia entusiasmó a otros a repetir la jugada en sus pueblos.
Así, mañana miércoles estará en Gualeguaychú a las 19 hs. En el Salón Las Camelias en calle Roffo 1509, donde arengará sobre “El mandato de la militancia : política, historia y esperanza”.
Imposible no reparar en que, lo de Urribarri aparece como único ante la pasividad política de la dirigencia que integra el Frente de Todos. Se muestra, guste o no, como uno de los pocos dirigentes en acudir al llamado de una militancia que aparece como desguarnecida frente a una oposición segura de tener la vaca atada y un triunfo asegurado en el 2023.

“Para levantar el ánimo”, dicen que es la frase que utiliza Urribarri para explicar su actitud.