No pretendo que mi decisión sobre determinados temas sean la verdad absoluta, pero sí como gobernador de esta provincia tengo el derecho y la obligación de marcar a mis compañeros de hacer cumplir lo que prometimos durante la campaña electoral. No ganamos la elección de noviembre del año pasado, prometiendo aprobar leyes que involucran a todos los sectores de la sociedad, sin el debate correspondiente y la falta de participación en la elaboración de determinados proyectos.
La opinión, del diputado César Aldáz, en determinados temas de gobierno, no son para mi una más, sino que siempre tengo el tiempo suficiente para escucharla, porque respeto su investidura como legislador. Es una opinión autorizada y jamás me atrevería a descalificarla en ningún ámbito. Puedo pensar distinto, defiendo mis ideas, pero no me considero dueño absoluto de la verdad.
Es mi obligación como gobernador, hacer cumplir el Plan de Gobierno por el cual trabajamos codo a codo con los equipos técnicos durante la campaña electoral y que yo recuerde no asumí ningún tipo de compromiso con la sociedad, de dar vía libre a este tipo de iniciativas que no se encuadran dentro de la plataforma de gobierno.
Para los que les falla la memoria, les recuerdo que esta es mi tercera gobernación y no necesito que me brinden una clase acerca de la división de poderes del Estado. Sé cuales son las obligaciones Y deberes de los funcionarios públicos.
Le recuerdo al diputado, que los que piensan distinto a mí, no pagan costos políticos. Soy un hombre de la democracia y la ejerzo sin ningún tipo de soberbia. La revancha y el rencor no forman parte de mi forma de conducirme en política.
Jorge Busti
Gobernador
