Desde la Casa Gris se dejó trascender, ayer, el malestar persistente en el oficialismo por la cláusula de reelección votada por la Convención Constituyente, en el marco de la sanción del Régimen Municipal, según lo consigna El Diario. La redacción en cuestión deja fuera de competencia, en 2011, a los presidentes municipales que hoy cumplen su segundo mandato, muchos de los cuales están alineados férreamente a la gestión de Sergio Urribarri. La medida no es menor, apunta a complicar el proyecto reeleccionista de Urribarri por el caudal electoral que estos intendentes sumarían, en sus departamentos, a la boleta de gobernador y vice. Como se ha dicho, la cláusula de la polémica, concretamente, afecta entre otros, al intendente de Chajarí, Juan Javier García; al de Nogoyá, Faustino Schiavoni; al de Feliciano, Osvaldo Viano; al de Victoria, César Garcilazo; Diego Lara, de María Grande; Juan Carlos Brambilla, de Crespo; Luis Schaaf, de Rosario del Tala, por mencionar sólo a los oficialistas.
Justamente por esto, los constituyentes Sigrid Kunath, Nelio Calza, Celeste Pérez y Mario Heyde votaron en contra de esa cláusula.
SCHIAVONI
“Usar la Constitución para manipular una interna partidaria es algo inaudito”, enfatizó el intendente de Nogoyá por segunda vez, Faustino Schiavoni. El dirigente fue parte de la comitiva que ayer viajó a Buenos Aires para realizar varias consultas con expertos a fin de lograr la anulación de la cláusula, consigna El Diario. “Hay antecedentes en la Constitución Nacional y en la propia Constitución de Entre Ríos de cláusulas propuestas, e incluso incorporadas definitivamente al texto, que han sido declaradas inconstitucionales por la Corte y este es un caso”, advirtió Schiavoni.
A la queja de los intendentes se añade el hecho que, según denuncian, al momento de un encuentro con los convencionales del oficialismo, para hablar del Régimen Municipal, se les presentó “un dictamen de mayoría distinto al que finalmente se aprobó”.
Cuestionan no haber sido anticipados de “esta proscripción” y que se haya adoptado “criterio distinto” al del gobernador y el vicegobernador actuales, que podrán ser reelectos en 2011, y al de los legisladores para los cuales no rige límite a la perpetuación en nuevos mandatos.
Lo cierto es que, a esta altura de los hechos, la cláusula en cuestión ha generado una fractura en el Partido Justicialista. Y es difícil imaginar cómo se saldarán las diferencias en la fuerza gobernante, que hoy pretende llegar a buen puerto con una nueva Constitución.