Fuentes de Botnia en Uruguay explicaron que inciden dos hechos: por un lado, se hace necesario bajar la producción debido a diferentes variables, y por otro lado, la parada de mantenimiento resulta inevitable, por lo que «la baja en la producción se iba a dar de todas maneras». Ante estas circunstancias, la empresa aprovecha y hace coincidir ambos sucesos.
La variable que más pesa para tomar la decisión de bajar la producción es el descenso de la demanda de pulpa de celulosa por parte de China, quien es uno los principales compradores. Este país debido a la crisis ha visto ralentizar su economía, lo que indirectamente influye en la medida adoptada por la empresa en Uruguay.
