El legislador se quejó de que “aplican aumentos impagables para los argentinos desde la comodidad que les da tener sus activos en el exterior”, pero alertó que “Argentina no puede manejarse como una empresa”.
“La inflación está destrozando el bolsillo de los argentinos”, indicó Bossio, al tiempo que agregó que “los sectores medios ya no llegan a fin de mes y los más vulnerables se vieron obligados a cambiar sus hábitos alimentarios con consecuencias sobre su salud y desarrollo”.
Para el diputado, “el cambio no llegó y los padecimientos de los argentinos en muchos aspectos se agravaron. Muchas familias, sobre todo de la provincia de Buenos Aires y el interior del país, nos manifiestan su desesperación porque no pueden hacerles frente a estos aumentos”.
“Las pymes y los comercios bajan las persianas porque no aguantan, el consumo no repunta y las economías regionales tienen serios problemas. Mientras tanto, aumenta la deuda. Es un modelo de minorías que solo les sirve a unos pocos que son amigos del Gobierno”, afirmó Bossio.
Por eso, consideró que “así es muy difícil lograr la confianza de los inversores para generar producción, trabajo y crecimiento”, porque “ni los propios ministros confían en el país y lo dicen”.
“Le pedimos al Gobierno que no se encierre en una lógica errada y que escuche, porque de no mediar cambios a los argentinos solo les espera más decadencia”, concluyó el diputado.
