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Benítez dijo que se gasta mucho más dinero en los efectos de las inundaciones que en las causas

Benítez dijo que la exención impositiva votada el miércoles en el Concejo abarca a muchas familias y comercios. “Es un esfuerzo financiero el que está haciendo la municipalidad al eximir de tasas”, indicó. Y que la Nación aportará millones de pesos para las viviendas comprometidas.

Para el edil, la naturaleza está siendo dañada por el ser humano y los efectos son las inundaciones. Parafraseando a William Shakespeare, citó la frase que reza “el problema del mundo es que los locos conducen a los ciegos”. “Somos ciegos que estamos siendo conducidos sino tenemos en cuenta que la verdadera causa del problema es el daño ambiental”, dijo.

En Concordia hay mucha tarea por delante en materia de medio ambiente. Entre ellas, mencionó que se siguen arrojando los residuos cloacales al río sin tratamiento alguno. Además se ha perdido la pureza de los arroyos debido a que hay plantas industriales que los contaminan.

“Los arroyos eran arenales con agua preciosa. Yo me bañaba y acampé un verano entero en Camba Paso. Era un lugar esplendido y hoy está abandonado. Bañarse en Los Sauces era algo totalmente satisfactorio. Era muy popular porque la gente de los barrios podía ir y bañarse en las playas. Era la pileta de natación de los pobres. El río era transparente y cristalino, tengo 44 años, no hace mucho de eso y no me considero tan viejo”, dijo. "El río tiene todo un lecho rocoso que va filtrando y limpiando y eso hacía que cuando llegaba a Los Sauces era transparente”, recordó.

Pero en la década del 80 el agua del río comenzó a tomar una coloración rojiza. “Era la deforestación que se producía en Brasil y en el norte argentino y nadie decía nada. El agua caía directamente sobre esa tierra colorada que nos terminó ensuciando el rio”, mencionó.

“No solamente tenemos que mirar las consecuencias sino que también tenemos que mirar las causas verdaderas del desastre ambiental. Esto no es obra de la naturaleza. Es totalmente antinatural la forma en que el río está creciendo”, acotó.

“¿Quién puede estar en contra de eximir a toda esta gente que se inundó? Había un consenso generalizado con respecto a aprobarlo”, señaló el concejal. Pero aclaró que el Estado municipal va a perder recaudación con respecto a las tasas ya que debajo de la cota 14 no se va a cobrar a las viviendas ni a los comercios ese tributo. “Hay un efecto económico”, indicó.

A ello se añade que se deberán construir viviendas. En su visita a Concordia, el presidente Mauricio Macri se comprometió a aportar el 66 % del costo de la edificación de casas para quienes habitan en cotas inundables. El porcentaje restante debe salir del algún lado: de la Provincia, la Cafesg o el Municipio.

Benítez incluyó en el cálculo de las erogaciones el dinero para los ribereños. El miércoles pasado,  los integrantes de la Asociación Ribereños Río Uruguay (ARRU) volvieron a reclamar un resarcimiento por los daños que vienen padeciendo, históricamente, por la construcción del embalse de Salto Grande. En ese sentido, el presidente de la entidad, Bautista Dalmolin, reiteró la importancia de la ARRU en la “lucha por lo justo”. Detalló que son más de 600 socios y que vienen reclamando desde hace años un resarcimiento por los daños causados por las aguas. “No pedimos que nos regalen nada, queremos que nos den lo que nos corresponde”, dijo Dalmolín.

Benítez dijo que es un “montón de dinero” el que se debe desembolsar para atender la situación de emergencia y muchos menos el que se destina a terminar con las causas del daño ambiental.

“No es natural una inundación cada tanto. Si no estuviese la represa esta inundación hubiese sido mucho peor que la del 59”, acotó.

 

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