La diputada hizo referencia al sector de la industria con exenciones en el pago de los ingresos brutos. También a la actividad del transporte ya que hay otra eximición en ingresos brutos y una “exención a la actividad de los servicios hospitalarios y de salud que prestan clínicas y sanatorios”, dijo. En ese sentido, puntualizó que se trata de un 30 % de exención del impuesto inmobiliario a los inmuebles que pertenecen a clínicas y sanatorios.
Pero dijo que la propuesta también contemplaba avanzar en la reducción de ingresos brutos a la actividad agrícola-ganadera. “Es una cosa muy gravosa, muy injusta”, dijo. “Hay una situación que plantea la mesa de Enlace que queríamos que se introdujera también, que se incorporara pero el oficialismo se abstuvo exclusivamente al proyecto del Ejecutivo y no quiso abrirse a otras exenciones, sobretodo al sector agrícola-rural”, dijo Bargagna.
No obstante, señaló que los legisladores del oficialismo manifestaron en comisión que mañana, luego de aprobar las modificaciones planteadas, se abocarán a analizar el planteo de los sectores rurales.
¿Van a apoyar el proyecto del Ejecutivo? “No podemos decir que no porque nos quejamos mucho del ‘impuestazo’ y esto es un alivio pero para un sector que el sector de la pequeña y mediana industria, el transportista y al dueño de sanatorio de la provincia”.
Pero, al mismo tiempo, dijo: “nosotros tenemos que empezar a dar respuesta a lo principal que es al campo. Al pequeño y mediano productor que no puede descargar y no es formador de precio y que está con una carga impositiva muy gravosa de la Nación y de Provincia que hace que su sustentabilidad esté muy comprometida cuando es el pilar de la economía”.
Respecto de las críticas de los gremios estatales y docentes, Bargagna dijo que el presidente de la Cámara, José Allende, quien es el secretario general de UPCN Entre Ríos, y el diputado y representante del sindicato de comercio de Paraná, Daniel Ruberto, “no manifestaron nada en contra del proyecto”. “Por el contrario, estaban fundamentando y darían aprobación al proyecto”, dijo.
Por último, dijo que el “impuestazo” tenía como finalidad aumentar los salarios. “Y eso no ha ocurrido”, mencionó. En cambio, señaló que se ha incrementado el gasto público debido a un “drenaje de dinero” por desmanejo o destinos inciertos de los fondos. “Algunas aventuras que se han hecho capitalizando proyectos que desaparecieron y se ha distraído los ahorros y no se han destinado adonde tendrían que haberse destinado. Hay que revisar el gasto público, hemos tenido épocas de bonanza, de aumentos de recaudación pero no se ha podido dar respuesta ni a la salud, ni a la educación ni a tratar de salir de la precarización laboral de los empleados del Estado”, añadió Bargagna.