El acto contó con la presencia del coordinador del Área de Desarrollo Regional y Capacitación de CAFESG, Angel Giano; el Supervisor Departamental de Educación, Saúl Dri; el secretario de Extensión Universitaria de la Facultad de Ciencias de la Administración, José Benjuya, y docentes de las instituciones receptoras del Programa.
Además concurrieron los profesionales encargados de la articulación del Programa, psicopedagoga Cecilia Agosti y psicólogo Flavio Muzzy, y los ocho miembros restantes que completan el staff técnico del POVO. También se hicieron presentes algunos padres de los chicos que iniciaron ayer el ciclo.
Giano destacó que “este Programa es una decisión del directorio actual de CAFESG orientada a acompañar a los estudiantes de los últimos años de escuelas de Enseñanza Media públicas, de gestión privada y ‘bapas’, en el proceso de toma de decisiones, y fundamentalmente a los jóvenes que no tienen claro aún su horizonte de estudios o trabajo, orientándolos respecto a su futuro educativo o laboral”, sintetizó.
El coordinador remarcó además que “ustedes, los destinatarios de esta iniciativa, pertenecen a una generación de estudiantes que no ha tenido clases en forma normal en sus primeros años de secundaria, básicamente por el permanente conflicto educativo que caracterizó a la gestión anterior de gobierno. Entonces no sólo no han tenido la posibilidad de aprender todos los contenidos establecidos, sino tampoco la chance de realizar una proyección sobre qué van a hacer terminada la escuela; por eso la intención desde CAFESG con este Programa es ayudarlos a hacer más predecible –si cabe el término– su futuro”, resaltó.
A su turno, el Supervisor Departamental de Educación, Saúl Dri, puso de relieve que “desde un primer momento decidimos acompañar decididamente esta idea de CAFESG”, e indicó que el rol de la repartición a su cargo “es fundamentalmente organizativo, es decir consiste en identificar los sectores educativos que en principio se verán beneficiados con esta propuesta”.
La filosofía del Programa
La psicopedagoga Cecilia Agosti, integrante del equipo de profesionales que lleva adelante el POVO, expresó que “la idea es poder brindarles un tiempo y un espacio a los chicos para que puedan pensar sobre qué cuestiones son las que están obstaculizando su arribo a la toma de una decisión”.
En este sentido, el psicólogo Flavio Muzzi enfatizó que “nos parece que es importante que cada uno de los chicos tome personalmente esa decisión. Nadie puede tomarla por ellos, ni los padres, ni los docentes; tiene que ser una dedición pensada por cada uno ellos, sea lo que sea que cada uno elija, porque cuando hablamos de elección no estamos pensando únicamente en que elijan seguir estudiando algo, puede ser que digan ‘yo quiero trabajar’ o ‘yo quiero aprender un oficio’”, graficó.
El Programa de CAFESG –que se extenderá en una segunda instancia a los siete departamentos restantes de su zona de incumbencia– “ha sido pensado como un espacio para que los chicos puedan preguntarse ‘¿qué nos está pasando?’, e identificar cuáles son los obstáculos que están teniendo para poder elegir, los cuales generalmente tienen que ver con el miedo a equivocarse, el miedo al fracaso, el miedo a caer en una rutina porque ven a sus padres que trabajan todo el día y no disfrutan de lo que hacen; o también con la falta de una oferta laboral”, enumeró Agosti.
Sin exámenes y junto a los padres
Cada grupo –compuesto por aproximadamente 40-50 alumnos– tendrá siete encuentros semanales de una hora y media cada uno. En tanto, un octavo encuentro ha sido reservado exclusivamente para los padres. “Además de generar un ámbito para que cada uno pueda ir pensando sobre sus cosas, se brindará información a los chicos sobre las distintas ofertas educativas de la ciudad, la zona y otras plazas”, anticipó la profesora Susana De Ibarra, docente del Área de Desarrollo Regional de CAFESG.
“No van a ser clases, no habrá pruebas, no tomaremos lecciones; son encuentros para trabajar sobre la toma decisión”, aclaró Agosti.
“Nos interesa particularmente la participación de los padres –confesó De Ibarra– porque la intención es vincularlos naturalmente con esta propuesta, de modo tal que puedan trabajar en conjunto con los alumnos, los directivos de las escuelas, los profesionales y el Estado, en este caso representado por CAFESG”, señaló.
La prueba piloto de 2005
De acuerdo a un relevamiento encarado por CAFESG a mediados de 2005, sobre 29 escuelas secundarias existentes en Concordia, sólo 11 (37%) tenían gabinete de Orientación Vocacional.
El POVO se puso originalmente en marcha –a modo de prueba piloto– a fines de setiembre de 2005 y alcanzó a un total de 45 cursos terminales (aproximadamente 450 alumnos).
“A la versión experimental del año pasado la modificamos de acuerdo a los distintos niveles de análisis: desde CAFESG, desde los directivos, desde los chicos y desde los equipos de profesionales que trabajamos en el POVO”, manifestó el psicólogo Muzzy.
“Tomando como base estas devoluciones introdujimos algunas variantes que apuntan a mejorar el Programa en esta edición 2006”, comentó la psicopedagoga Agosti, quien agregó que “la experiencia del año pasado nos sirvió para confirmar que los chicos necesitan un tiempo y un espacio para poder pensar sobre lo que ellos quieren”, afirmó.
Este año el Programa de Orientación Vocacional y Ocupacional de CAFESG se extenderá hasta noviembre y llegará a más de 1.200 estudiantes de divisiones terminales de escuelas secundarias de Concordia.
“La intención es aportar una propuesta válida para las instituciones, los chicos y los padres, que el año pasado participaron y resultó una experiencia muy enriquecedora para ellos y para nosotros”, manifestó por último Agosti.