Media docena de comerciantes se sentaron entre las gradas y siguieron atentamente el debate entre los concejales. Durante la oratoria, el único que los criticó explícitamente fue el concejal Ricardo Larocca (UCR), quien indicó que “la gente lamentablemente hoy privilegia sus intereses económicos, sus intereses individuales por sobre los intereses de respeto a la vida humana”.
Hay que recordar que el Concejo había optado por dejar una sola mano de circulación en Illía luego de que, el 10 de noviembre pasado, María Elena Almirón Quiroga, una adolescente de 13 años, falleciese al ser aplastada por las ruedas de un acoplado en esa avenida.
Uno de los comerciantes presentes, Ricardo Niez, dijo que el último accidente no fue exactamente por el tránsito. “Simplemente fue por un bache; la chiquita se cayó por ese bache; fue el motivo que la atropellaron. No es la culpa de la avenida”.
Asimismo, sostuvo que están “peleando para ensancharla. Tenemos que ir para adelante, no para atrás porque para adelante significa crecer y crecer y hacer una avenida más ancha porque si el tránsito aumenta necesitamos más carriles”.
Por el contrario, entiende que el Ejecutivo decidió dejarla “como está”, con una sola mano, “para no hacer inversiones y con eso se lavan las manos. No la ensanchan, hacen una sola mano y listo. En realidad, no miden lo que nos perjudica a los comerciantes”.
Insistió en que “hay que hacer una avenida como hacen en las ciudades grandes; tenemos que copiar lo que hacen las ciudades grandes que van en punta siempre y más con el tema del tránsito”.
Carlos Eduardo Bou, otro comerciante que se pronunció a favor de la derogación lisa y llana de la ordenanza, argumentó que “no hay entradas a Concordia. Aparte de una complicación comercial, es una complicación para todas las ciudades aledañas a Concordia”. Precisó que también obstaculiza la entrada de ambulancias que se dirigen al Masvernat.
Otra comerciante, Perla Morel, señaló que se retiraba conforme porque: “de aquí en más se comienza la lucha de todos los comerciantes porque nos dan un plazo de seis meses pero vamos a seguir luchando para que siga siendo avenida”. En realidad, la suspensión no tiene plazos. De igual forma, Morel dijo que quieren “que sea avenida, que se ensanchen ambas partes y que se parquize”.
Niez también expresó que la suspensión de la ley significa que los comercios que: “siempre estamos invirtiendo y haciendo permanentemente modificaciones para atraer nuestros clientes, lo único que hace es no dejarnos a nosotros aplicar las inversiones que teníamos prevista; tenemos que estar esperando a ver cuando van a derogar la ley, cuando van a aprobar o no aprobar. Lo que hacemos es estar estancados con las futuras inversiones que teníamos pensado hacer”.
Bou dijo que las calles aledañas están “totalmente destrozadas”. Pero, asimismo, puntualizó que los “destrozos” no son las causas que complicarían la entrada de turistas a Concordia. La atribuyó también a la falta de seguridad. “Ellos saben que Concordia siempre fue una ciudad que siempre se la vio como violenta. Te podés imaginar que cierto porcentaje, ya sea poco, entran y tienen ciertos problemas; quien va a querer venir o quien va a querer visitar, quien va a querer entrar”, se preguntó.