En la Asociación, el lugar y la metodología elegida tienen sus razones: se trata de nacionalizar el conflicto. Ocurre que a la lista de demandas provinciales, añaden el reclamo por la constitución del Fondo Federal de Salario y el Fondo Federal de Salud.
En la provincia, los trabajadores nucleados en ATE demandan una recomposición salarial del orden del 30 %. En paritarias nacional se acordó el 21% y “el gobierno de la provincia está deslizando la posibilidad de aceptar esa propuesta”, explicó el dirigente Marcelo Ríos con las advertencias siguientes: “El gobierno dio un 10 % de incremento que se lo comió la inflación, van a pagar el 5 % más en julio y si equiparan con Nación van a querer agregar un 6 %, nada más”, lo que aseguró “es totalmente insuficiente por el costo de vida”.
En materia de incrementos para los estatales entrerrianos, “todos sabemos que lo que se dio, 10 %, no alcanzó para nada, fue totalmente insuficiente y había sido rechazado por los trabajadores. Ahora lo que pretendemos es una recomposición del 30 %”, reiteró.
Sin embargo, la medida con la que se dará continuidad a un largo reclamo del sector con el objetivo de lograr que se lleven los salarios de los trabajadores a “un nivel de dignidad”, también se orienta a “lograr el pase a planta de los contratados”, por lo que se habla de “poner fin a la precarización laboral”, se sostiene.
“Tenemos más de 5.000 compañeros que están en condiciones de precarización –contratados, suplentes– con antigüedad suficiente para estar en planta permanente” y sobre los cuales “se han hecho muchos anuncios pero en concreto no hay nada”, dijo a El Diario, el secretario de Prensa de la Asociación.
En rigor, lo que estaría ocurriendo es que si bien algún paso se concreta con relación a regularizar la situación de los agentes, el mismo no guarda relación con la magnitud del problema. “Ahora, pasan a planta un grupo de compañeros –137– que estaban incluidos en un decreto de estabilidad y eso es producto de las reuniones de las mesa donde se convocan las partes, pero esa medida está vinculada a un decreto de 2007, 2008 que no contempla a otro grupo enorme de trabajadores”, aproximadamente, 5.000.
ATE habla de “largo reclamo” porque ese pedido de pase a planta permanente como otros, forma parte de un acta acuerdo que se firmó en agosto de 2007 con el entonces gobernador Jorge Busti y que por ser parte de esa gestión –ex ministro de Gobierno–, el actual mandatario “Sergio Urribarri hizo propio y se comprometió a cumplimentarlo”.
Ríos hizo hincapié en el reclamo por el cumplimiento de esa acta acuerdo porque “parece que estamos pidiendo nuevas cosas, cuando en realidad, hace años que las venimos reclamando”.
El dirigente también precisó el pedido de derogación del decreto Nº 1.172, “viejísimo”, por el que se congeló el adicional por riesgo que perciben los trabajadores de Salud, de modo de poder actualizar su valor. Luego hizo una enumeración de otros reclamos que pueden inscribirse en la gran demanda vinculada a “condiciones laborales”.
Desde la organización destacaron que “la pelea es por salario” por lo tanto diferencian los acuerdos que en Salud se alcanzaron respecto del arancelamiento.
