
Es militante radical desde 1982 cuando tenía 18 años. En ese momento estudiaba en La Plata y allí lo vio a Raúl Alfonsín. “Dije: este tipo transmite las ideas que yo tengo en la cabeza; esto es lo que yo quiero”, recordó. Cardoso militó en Franja Morada. Las ideas que tenían en su época universitaria siguen siendo las mismas hoy en día: libertad, justicia social, equidad, democracia. “Nunca pensé que la política se debe dejar en manos de tecnócratas. La política es eso: es política”, remarcó. “Hay que tener a todos los técnicos asesorando pero no ser un esclavo de los técnicos en ningún ámbito: ni en la economía, ni en la educación, ni en las cuestiones sanitarias”, añadió.
Según sostuvo desde hace tiempo que los dirigentes de las diferentes líneas internas le sugerían que se involucrarse en el Comité. Pero Cardoso anteponía sus cuestiones laborales y familiares. “Aunque parezca egoísta, hay situaciones que debe manejar personalmente cuando tiene hijos chicos, tiene un trabajo que sostener y un montón de cosas”, dijo. Pero esta vez decidió aceptar porque su situación personal cambio y tiene más tiempo para dedicarla a la vida partidaria.
“En el orden local hay que trabajar para que el radicalismo crezca y pueda llevar adelante sus ideas y colaborar con esas ideas que siempre tuvo. No es algo sencillo ni el trabajo de uno solo, ni de dos ni de tres sino que es un trabajo conjunto”, dijo.
Respecto de las precandidaturas que ya están instaladas para las elecciones legislativas de 2021, los intendentes de Chajarí y Viale, Pedro Galimberti y Darío Schneider por un lado, y el ex ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo: “yo personalmente soy radical y voy a estar del lado del radicalismo”. “Si Galimberti es la persona que el radicalismo dice que va a ser el candidato o Schneider, yo voy a estar colaborando con mi partido”, recalcó.
Cuando fue consultada acerca de del papel que tuvo la UCR durante los cuatro años de Cambiemos, -muchas veces quedó como furgón de cola- Cardoso coincide en esa apreciación. “La decisión de juntarse fue cuestionada en su momento. Pero creo que a la larga no fue tan mala. Es fácil hablar con el diario del lunes. Fue una muy buena decisión a pesar de que muchos estábamos o estaban en contra de esa unión y de la que hoy siguen estando en contra muchos”, indicó.
La situación de Concordia
Respecto de la situación de la ciudad, dijo que hay dos mundos: uno desde la plaza hasta la Costanera y el otro fuera de los boulevares. “El municipio tiene una imagen en el centro y otra fuera”, señaló. De todas formas, hay un denominador común entre ambos sectores. “Lo único que se espera de la municipalidad de Concordia es conseguir el contrato, el laburo, el puestito, el lugar. Esa es la expectativa de la gente. Tener el conocido que lo ubique acá o tener el negocio o ser el proveedor”, señaló.
“El municipio ni siquiera fomenta la iniciativa privada. No otorga herramientas parta que los privados se desarrollen. Al contrario, parece que busca esa situación. Es un municipio que está sobredimensionado y eso hay que pagarlo. Hay una cuestión impositiva que es agobiante”, señaló. Por su profesión, conoce gente que, por ejemplo, le trae tasas de Obras Sanitarias de un monoambiente en la zona céntrica donde se paga más cara el agua que una casa de 10 por 40 metros. “¿Como puede ser? Hay algo que está mal, que no funciona”, reflexiona.
Al mismo tiempo, señaló que ve en el centro muchos locales cerrados. “La verdad que al pequeño comerciante, que tanta mano de obra emplea, la verdad es que lo veo en mala situación”, dijo. ¿Pero cuanto contribuyó el gobierno nacional de Cambiemos a esa situación de decadencia? La dirigente de la UCR no cree que la debacle económica haya comenzado el 10 de diciembre de 2015. “La decadencia viene ¿desde hace cuanto? La provincia de Entre Ríos viene en decadencia ¿desde hace cuanto?”, dijo.
En ese sentido, se define como defensora de la educación pública. Y a sus hijos los envió a escuelas públicas. Sin embargo, veía mucho “desgano” en las docentes. Una de ellas, llegó a decirle que sus hijos no estaban para estar ahí sino que debían ir a una privada. “Eso fue hace 20 años. Te cansás de luchar con eso y terminas haciéndoles caso porque lo que querés es que se eduquen bien y tenes la posibilidad de hacerlo”, dijo.
La educación es “la base de todo”, sostuvo. “Cuantas veces hemos escuchado a los docentes quejarse de la situación de los edificios escolares o quejarse de los salarios que les ponen códigos que después no los ven reflejados en las jubilaciones y tienen problemas. ¿Cuándo se tomó una decisión de fondo en todo eso? El problema es que no les hagan paro, mantenerlos contentitos porque la solución de fondo no se ve nunca. ¿Cuándo van a dar una solución de fondo para el Iosper? ¿Para la Caja de Jubilaciones?”, señaló. Para Cardoso, el único mérito del gobierno provincial es que los gremios no salen a la calle. Y dijo que en realidad no era un merito porque termina siendo una cuestión que “las arreglan entre ellos” con candidaturas en épocas de elecciones en lo que definió termina siendo “un intercambio de favores”.
Para Cardoso, hay que fijarse objetivos para el desarrollo de la provincia. Pidió políticas de radicación de industrias para la ciudad y la provincia. O promoción de actividades turísticas. Pero, en cambio, ve solo cuestiones de coyuntura. “Se soluciona este problemita para no tener líos”, dijo. “Es un problema la decadencia del entrerriano en sí. Santa Fe, una provincia que fue gobernada por muchos partidos, no tiene esa impronta y esta muchísimo mejor que nosotros”, remarcó. Lo mismo en Córdoba. “Es diferente hasta culturalmente. Y nosotros estamos acá: ‘lo que dice el señor Presidente, lo que dice el señor Presidente’”, dijo mordazmente.