El Intendente Cresto apuntó en dos direcciones con el objetivo de despejar esta incognita que era utilizada por la oposición de Cambiemos y que él entendía fuera de lugar.
Lo primero que hizo fue hacerle saber al gobierno de Gustavo Bordet que, si Asueta seguía sin responder a los mandos naturales, iba a reclamar que, posterior a las elecciones, Asueta dejara de ser funcionario provincial. Es decir que Bordet lo echara.
Si eso no ocurría, lo interpretaría como un mensaje de enfrentamiento político.
El segundo paso fue hablar con Asueta de modo de entender la razonabilidad del encono y el no reconocimiento del ttriunfo y de la derrota.
La conversación con Asueta resultó ser más que sorprendente de acuerdo al relato de uno de los presentes en esa especie de reunión.
Luego que Cresto le presentara ejemplos más que categóricos respecto a actitudes adoptadas por otros candidatos luego de las PASO, como ocurrió en Paraná donde el candidato PRO, Gainza perdió y a pesar de que Varisco está procesado por narcotráfico, se alineó detrás de su candidatura y salió a apoyarlo públicamente.
Asueta sorprendió con su salida. Le dijo a Cresto que el camino de él no se iba a chocar ni con Bordet ni con él ya que, en tu caso (en referencia a Cresto), vos en el 2023 vas por la candidatura a gobernador y yo insistiré con la intendencia así que, si vos me lo permitieras, podemos trabajar juntos.
Palabras más, palabras menos, esa fue la conversación que, debido a que Asueta no nos atiende el teléfono, no la pudimos chequear con él, pero que DIARIOJUNIO publica igual con el compromiso periodístico de publicar su desmentida si este relato no coincidiera con sus dichos.
