“Los directores de escuela siguen haciendo lo que tradicionalmente cada vez que el familiar solicitaba un certificado de escolaridad para percibir el salario familiar”, explicó Dri. A principios de año, ya sea para una empresa o para un organismo del Estado, siempre exigen para el pago del salario familiar la presentación del certificado de escolaridad. El mismo documento se exige a fin de año para corroborar la finalización de los estudios.
Lo que puede suceder es que el alumno abandone los estudios durante el transcurso del ciclo lectivo. “Ahora si se entrega un certificado a comienzos de año y después a lo largo del año lamentablemente el chico abandona o deserta y va a algún otro establecimiento, en ese establecimiento no se va a extender el certificado de fin de año”, indicó el titular de la Departamental.
Un razonamiento de sentido común apuntaría a un tutor que evalúe a lo largo del año que el alumno no deje de asistir a la escuela para no perder la asignación. Pero Dri ratificó que no tienen ninguna instrucción acerca de controles específicos en ese sentido. “El único control son las estadísticas que nosotros podamos ir realizando pero no hay un seguimiento específico”, detalló.
Asimismo, en la Departamental se desconoce cual será la matrícula escolar de este año, teniendo en cuenta la posibilidad de que se inscriban chicos que habían quedado fuera del circuito de escolarización a raíz de la implementación de la Asignación Universal. “La verdad no sé si va a ser más que la que tenemos todos los años pero seguramente todos van a asegurar el certificado de comienzo de clases. Lo que importa es que eso tenga una continuidad a lo largo del año”, indicó.
Incluso añadió que en algunas escuelas no hay expectativas para este año de un crecimiento inusitado de la inscripción. “Pero en otros casos hay algunos que están planteando que puede llegar a haber una inscripción un poco más alta porque la gente va a querer asegurar el certificado pero no hay que asegurar solo esto sino la continuidad del chico en el sistema educativo”, dijo Dri.
Si se cumple la segunda hipótesis, podría producirse falta de bancos en las instituciones escolares. “Es algo que vamos a tener que ir manejando en la medida en que nos sea requerido el banco. Nosotros tenemos la obligación de dar el banco o cabida a todos los que lo soliciten”, acotó el funcionario.
Si se instrumentase una evaluación periódica y personal, habría que ver con que disponibilidad de recursos humanos se cuenta a tales efectos. Al respecto, Dri opinó que “lo que pasa es que hay que ver si se llega a implementar algo de ese tipo de que manera se va a hacer. Si va a haber un seguimiento y que área lo va a hacer. Esta es una definición que escapa a lo que yo te pueda responder”, indicó.
Un ejemplo de seguimiento de la escolarización es del plan “Jóvenes por Más y Mejor Trabajo”. “Ahí si hay todo un seguimiento que se va haciendo de si se insertan o no se insertan en el sistema educativo”, sostuvo. Si bien interviene Educación, “lo manejan de otro ministerio; hay una participación importante del Ministerio de Trabajo”.