Se trata de Martín Ezequiel Bengolea Cotto quien fue encontrado ahorcado en la tarde del sábado cuando se padre regresó de cumplir con su jornada de trabajo. De acuerdo con los primeros datos que se manejaron provenientes de Urdinarrain, de donde la familia es oriunda, todo hacía suponer que el chico se había suicidado, pero con el correr de los días se dieron mayores precisiones al respecto.
De acuerdo con lo que informó Radio Cristal y reproduce diario El Argentino cuando a San Martín llegaron su madre, hermanas y tíos -que habían viajado desde Urdinarrain- se enteraron que Martín había sido asesinado, según todos los indicios.
Según se sabe, su papá partió al trabajo -como todos los días, saliendo de su casa el viernes 25, y cuando regresó al día siguiente, por la tarde, encontró a Martín con las manos atadas y colgado de una ventana con un cinto. El forense indicó que el chico había fallecido el viernes a las 23.30 y ahora se espera la autopsia para determinar las causas reales de su muerte ya que, además, tenía golpes en uno de sus ojos. La Policía de San Martín ya tendría dos personas detenidas, involucradas en el crimen.
Cabe señalar, que los restos de la víctima depositados en la morgue del cementerio, permanecen con custodia policial, ya que hubo intentos de profanar el féretro. Martín Bengolea, estuvo internado gran parte del año 2005, en el Hogar de Adolescente de Urdinarrain y luego decidió irse con su padre que trabajaba en Buenos Aires, mientras que su mamá, Silvina Cotto, vive con el resto de sus hijos en Urdinarrain.
