Agregó: “me gustaría dejar claro para todos los vecinos, para los entrerrianos y para el país entero que ninguno de los dos últimos gobiernos a los que atravesó este conflicto traicionó jamás la postura de la comunidad de Gualeguaychú; por el contrario, siempre se comprometieron y acompañaron cada pedido y manifestación de la Asamblea, siendo coherentes no sólo en su postura frente al tema, sino también sabiendo siempre que el lugar donde tiene que pararse un gobierno popular es al lado del pueblo”.
Precisó que “ni el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner ni el de Néstor Kirchner –aun con los errores que se pudieran haber cometido- negociaron jamás en contra de los intereses de Gualeguaychú, y que a pedido de este pueblo –y por entender que la justicia nos asistía plenamente- se denunció a la República del Uruguay ante la Corte Internacional de la Haya, donde se concurrió a defender nuestra postura con todos los elementos y pruebas aportados por la Asamblea y por los organismos que junto a Gualeguaychú se definieron pertinentes”.
Señaló que “jamás a estos gobiernos se les ocurrió “levantar el corte a patadas” como pedían muchos, usando la fuerza pública para desmovilizar a los vecinos que peleaban por una causa justa. Nunca, ni la actual Presidenta, ni el ex Presidente Néstor Kirchner fueron serviles y –a diferencia de muchos- siempre fueron coherentes en su postura con esta causa del pueblo de Gualeguaychú”.
Posteriormente expresó que “La Corte Internacional de La Haya dictaminó con claridad que fue la vecina República del Uruguay la que incurrió en delito, la que obró en contra de la buena fe. Y nada tiene que ver con eso el gobierno nacional argentino, ni los gobiernos provinciales. No es Cristina la responsable del dictamen de la Corte, ni tampoco de que la pastera esté instalada y funcionando en el Río Uruguay”.
“Entiendo el enojo, la angustia y el desánimo que pueda provocar el dictamen, pero, se preguntó ¿por qué cargar las tintas y predisponer en contra del gobierno argentino? ¿quién escribe estas proclamas? y ¿con qué intereses políticos lo hacen?.
El dirigente apeló “a la integridad y la capacidad del pueblo para sobreponerse de los malos momentos. De este conflicto no saldremos sembrando zizaña, con ardides políticos que oscurecen el diálogo sino con inteligencia y reflexión seria, con trabajo conjunto”.