La actual medida de AFIP en el mejor de los casos puede significar un leve mejoramiento de los tiempos administrativos y judiciales, pero no resuelve el origen del problema: la acuciante situación fiscal de cientos de miles de empresas ante la falta de planes de facilidades de pagos y una moratoria adecuada para el sector.
Por estos motivos APYME exige declarar la emergencia fiscal de las Mipymes, que son el 95% del total de las empresas existentes, suspendiendo por 180 días los embargos y ejecuciones fiscales por deudas hasta el 31/03/2018 con refinanciación y moratoria a 120 meses de todas las deudas consolidadas incluidas los planes caducos y deudas en trámite administrativo y judicial.
Es indispensable que las autoridades, además de tomar nota de la ola de embargos, actúen para que las empresas que proveen más del 70 por ciento del empleo no lleguen a esta instancia. El sector de las Pymes está en emergencia, y es urgente debatir y establecer políticas diferenciadas que contemplen su situación. Una verdadera agenda industrial y Pyme debe proponerse metas de desarrollo equitativo en beneficio de todos los sectores del trabajo y la producción nacional.