Desde las 10 hs. de esta mañana declaró en la sala penal de los tribunales de Concordia el testigo-víctima, Víctor Benítez, quien confirmó las denuncias efectuadas al día siguiente del 19 de junio de 2011.
Ante las consultas del fiscal Aníbal Lafourcade, y posteriormente de los defensores, Rafaell Briceño y Leandro Williman, el testigo -que manifestó tener 50 años de edad, para sorpresa de los presentes, dado que su cuerpo, seguramente producto de las precarias condiciones de vida y trabajo a las que se somete a diario, aparenta el de una persona mucho mayor-, declaró que “Los dos me pegaron, Zarate y el otro también, me pegaron con la goma negra” manifestó al ser consultado por la fiscalía, tras señalar que esa noche estaba festejando el día del padre con su hijo. Estábamos tomando vino con gaseosa, y escuchando música, pero no molestamos a nadie, porque es un grabadorcito chiquito y ni salimos de la casa” afirmó.
Contestando a la consulta del defensor Rafael Briceño: el testigo-víctima, relató que esa noche, los imputados llegaron y golpearon las manos preguntando por el dueño de casa. Afirmó después que cuando él se identificó como tal, los dos funcionarios se le vinieron encima y le dijeron “usted no es nadie” para luego golpearlo y sacarlo a la fuerza de la vivienda.
En su declaración el testigo manifestó también que los uniformados dispararon algunos tiros en el trayecto del portón hasta la puerta de la casilla y que lo golpearon con “la goma negra” en alusión al balistón policial o cachiporra.
A lo largo del interrogatorio conducido por el defensor de los uniformados,Williman, la Jueza, Silvina Gallo, debió llamar la atención del abogado en tres oportunidades, dado que la forma de interrogar del letrado distaba mucho de lo aceptable para un proceso judicial que respete los derechos de las personas.
Concretamente, la presidente del tribunal Silvina Gallo, tuvo que reformular las preguntas en términos que el testigo pudiera comprender, y el resultado fue una respuesta claramente opuesta a la que el abogado había logrado obtener previamente.
En algunos casos esto se debía al vocabulario empleado por el profesional, y en otros casos, la jueza debió advertir lisa y llanamente a Williman que debía hacer preguntas y no hacer conjeturas esperando que el testigo las avale.
Una vez acabado el testimonio de Benítez, los imputados, que estaban sentados al fondo de la sala, solicitaron a sus representantes legales, dar su versión de los hechos, razón por la cual se dio un nuevo cuarto intermedio.
En el transcurso de esta mañana, declararán los dos uniformados.