Las pintadas fueron realizadas el sábado a la madrugada. “Las personas que las hicieron fueron vistas por un vecino que vio los vehículos. Nosotros nos enteramos el sábado y se decidió realizar la denuncia policial. Por lo tanto, no se limpió sino que se dejó para que la Policía pueda ir y sacar fotos”, indicó.
Los alumnos, al ver las pintadas, “se sintieron muy inquietos, molestos y agredidos porque, de algún modo, al agredir la escuela los agreden a ellos también”. La escuela no tiene ningún de separación con el exterior. “Nosotros creemos que una escuela tiene que ser abierta y conectada con la comunidad”, expresó Lapiduz. Dentro de la escuela, hay un playón deportivo que es utilizada por vecinos los fines de semana.
“Una vez tuvimos un problema de robo hace varios años de una zona de la escuela que estaba sin alarma. Después se puso alarma ahí y nunca más hubo problemas”, señaló. El hecho no cambia la idea de mantener abierta la institución. “Me parece un hecho aislado de algunas personas que insisten en agredir la escuela pero creemos que si tuviésemos un cerco, romperían el cerco”, expresó. “No es que el hecho de que estuviera abierta la escuela los invitó a dañar”, agregó.
En anteriores oportunidades, aparecieron algunas pinturas pero nunca “tan agresivas: la cruz esvástica es nueva”. Ya habían encontrado inscripciones en el anteúltimo verano y hace pocos días, cuando se iniciaba el ciclo lectivo actual.
