Luego de las diversas gestiones realizadas ante las máximas autoridades de la provincia de Entre Ríos (Ministerio de Gobierno – Ministerio de la Producción y Ministerio de Trabajo), la autoridad de aplicación en materia laboral de la provincia se expidió de manera concreta sobre el régimen legal de los trabajadores de cosecha y empaque de arándanos, considerándolos encuadrados dentro de la Ley 20.744 – Ley de Contrato de Trabajo- , con alguna particularidad respecto del empaque de propia producción, y excluyéndolos del Nuevo Estatuto del Peón Rural y del régimen fiscalizado por el RENATEA (el registro nacional de trabajadores rurales).
En tanto, Camejo indicó que Renatea y Uatre (Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores), al queda excluida la Nueva Ley del Peón Rural, ya no podrán realizar inspecciones laborales. “No pueden hacer inspecciones y no los pueden obligar a seguir sacándoles plata a los trabajadores porque no vamos a dejar que les sigan sacando plata”, señaló.
Camejo indicó además que en las quintas están pidiendo gente para levantar la cosecha. “Ahora hay que trabajar y que se levante la cosecha. Hay una buena cosecha así que ojalá que les vaya bien y que acompañe un poco el clima”, indicó.
Apama además reclama que el Ministerio de Trabajo de la Nación también se expida en ese sentido para dar finalmente un único encuadramiento legal a los trabajadores y garantizar la seguridad jurídica tanto a los trabajadores como a los productores.
La histórica controversia surge porque los productores entienden que los trabajadores de cosecha y empaque de frutas – arándanos – se encuentran comprendidos dentro de los trabajadores a quienes se les aplica la Ley 23.808, estando en consecuencia excluidos de la ley 22.248 y su modificatoria N° 26.727, como tampoco se encontrarían comprendidos dentro de los trabajadores que deban registrarse en el RENATEA, por carecer en definitiva dicho organismo de competencia sobre los mismos.
Por otra parte, Camejo dijo que los trabajadores del arándano pueden venir y optar por la obra social. “Y exigir a sus empleadores que les den el alta para el Sindicato de la Fruta y para la obra social (Ospaf)”, indicó.
Por su parte, el RENATEA ha adoptado una posición contraria y ha venido realizando actividades inspectoras y como consecuencia, realizando requerimientos a productores, en virtud de multas que impusiera por entender que dichos trabajadores (cosecha y empaque de frutas) se encontrarían dentro de su espectro de competencias.
“Los productores somos blanco de constantes intromisiones por parte del RENATEA, organismo que se atribuye el poder de policía y realiza inspecciones que no están dentro de las actividades que le corresponden, sólo con el propósito de recaudar, cuando lo que corresponde es que nosotros respondamos ante la Ley de Contrato de Trabajo y no ante el Nuevo Estatuto del Peón Rural”, explicaron las autoridades de la Comisión Directiva de APAMA.
“Esto viene a complementar los fallos que en igual sentido ha dictado la Justicia del Trabajo de nuestra provincia. De esta forma se otorga claridad a la problemática laboral, tan necesaria a los efectos de dar a la actividad una mayor seguridad jurídica, sobre todo en esta época en la que ya comenzó el grueso de la cosecha”, agregó por su parte Jorge Sosa, asesor legal de los productores.