“Desde hace 45 días el ganado en pie ha venido en alza”, dijo Schnitman. El funcionario aseguró que los productores retienen vaquillas. “El campo ganadero ha decidido retener los animales que pueden reproducir y para engordarlos más en este tiempo”, señaló. En consecuencia, la menor oferta ha levantado el precio aunque también señaló que no los pueden retener por demasiado tiempo.
“El ganado en pie está pisando los $ 10, es elevadísimo”, indicó. “Todos saben que los incrementos son casi automáticos”, señaló. El frigorífico lo traslada a las carnicerías que a su vez también hacen lo mismo. “El mayor afectado como siempre en estos casos es el consumidor que está teniendo este producto en un valor muy alto”, señaló.
No obstante, Schnitman sostuvo que podría producirse una retracción en las pizarras debido a la subida del río en Entre Ríos. “Está subiendo y hay muchísimo ganado que están en las islas que se va a trasladar a tierra firme y en no muchos días más va a haber más ofertas en los remates”, expresó.
En esa hipotética situación, admitió que no es automática la baja del precio. Aunque puede bajar el precio del ganado en pie “en el resto de la cadena demora en que suceda o baja tibiamente”.
Por ese motivo, Schnitman recordó que hace tres años y medio el presidente en ese entonces, Néstor Kirchner, decía que no había que comprar carne. En efecto, en marzo de 2006 (hace cinco años en realidad), ante las maniobras especulativas de los consignatarios de hacienda el mandatario argentino en aquel entonces pedía comprar menos. “Compren menos carne si no bajan el precio», decía Kirchner e incluso, fue más enfático: «Es decir, no compren».
“El consumidor tiene una herramienta que también ejerce presión y puede introducir cierto elemento de conducta que indique a los productores de ganado como a los frigoríficos fundamentalmente a que tengan un criterio de precios más razonables”, indicó. “No comprar es una herramienta que el consumidor tiene para mostrar cierta unidad y seguramente, como en algún momento pasó, a ellos les afecta”, añadió.
No obstante, el titular de la Dirección de Seguimiento de Precios admitió que desde el gobierno ven que, después de un salto de los precios sucedido a fines de 2009, que no se recupera rápidamente el stock ganadero en el país. “Sigue estando afectado”, señaló.
El otro factor que introdujo en la ecuación de formación de los precios es la presencia de “sectores que manejan un rodeo bastante más que importante que retienen” y mercados como el de Liniers, “que manejan el 18 % del mercado, imponen precios en todo el país”, indicó.
Para ser más preciso, señaló que esos sectores son los que vienen dando pelea y la van a seguir dando en contra de la posición del gobierno. “Acá no es sólo lo que cuesta criar un animal o el tiempo que lleva criar un animal sino que también hay una pelea de intereses”, dijo Schnitman.
Respecto de los cortes populares que el gobierno nacional acordó con las cadenas de hipermercados, el funcionario señaló que se pueden conseguir. “En Concordia básicamente está el Carrefour. En algún momento, los cortes económicos de carnes están. No en la cantidad necesaria como para tener un abastecimiento regular”, señaló.
Al mismo tiempo, el titular de la Dirección de Seguimiento de Precios dijo que se necesita que otro conjunto de centros de ventas de carnes “puedan estar en condiciones de acceder a la compra de este tipo de carnes que envían de Buenos Aires”, indicó. “En algún momento, la red de supermercados de Concordia lo pudo trabajar pero estas son las dificultades con estos sistemas”, añadió.