Para el comercio es difícil trasladar los aumentos a los precios debido a que, si la gente gasta menos, lo más probable es que se restrinja aún más si observa una escalada de precios. “Todo eso hace que el comerciante se vea sobredimensionado en cuanto a los gastos y al costo fijo. Obviamente que la gente está preocupada y tratando de sobrellevar las quejas para que los aumentos no sean tan importantes”, manifestó.
La semana pasada, las autoridades de la CEC (Cooperativa Eléctrica de Concordia) explicaban como alcanzaba la suba de la luz a los comercios. Por ejemplo, un almacén o kiosco o pequeño comercio que pagaba $ 894 por consumir 800 kw/h por mes deberá abonar $ 1.936. En ese caso, la suba es del 116 %. El incremento repercute en forma directa en los comercios. “Los comercios no son ajenos a la suba de la energía. Si bien afecta a la comunidad entera, los grandes consumidores son los comercios”, indicó Kleiman.
Una alternativa que analizan es gestionar energía eléctrica en forma directa a la represa de Salto Grande. “El CICS se reunió con el Consejo de Administración de la CEC con el fin de buscar explicaciones y soluciones al aumento de la tarifa tan abrupto”, indicó. La explicación, por un lado, es la quita de los subsidios, y por el otro, la suba de la tarifa. “Encima todo eso sumado a unos meses donde el consumo es mayor que es el verano con los aires acondicionados. Entonces la suba se nota bastante; en algunos lugares no se puede ni pagar la luz”, añadió.
Para los comerciantes la energía es un gasto importante. “Más que nada aquellos que consumen mucho más que nada con aires acondicionados y con heladeras, cuando hay un incremento superior al normal, obviamente que las quejas vienen. Se hace difícil sostener los precios con tantos gastos”, dijo Kleiman.
En momentos como los actuales, alguien recuerda que Concordia está “al pie” de la represa de Salto Grande. Y que entre los objetivos fundacionales de la represa hidroeléctrica, figuraba proveer de energía barata a la región. No obstante, el presidente de la entidad intermedia aseguró que sucede todo lo contrario y Concordia tiene una de las tarifas “más caras en cuanto a consumo”.
Por ello, Kleiman indicó que analizan una alternativa concreta, pedir a la CTM que provea de energía en forma directa a la CEC. De esa forma, se evitaría a los intermediarios que hacen que “la energía se encarezca”.
Se trata de una alternativa de difícil concreción, teniendo en cuenta el marco regulatorio del mercado eléctrico. La energía que sale de Salto Grande ingresa al mercado energético nacional y luego retorna a Concordia.
Más adelante, respecto de la tasa comercial, el titular del CICS sostuvo que el reajuste de los mínimos imponibles hizo que los comercios chicos vayan subiendo a categorías superiores. “Es mayor la tasa que tiene que pagar. Es mayor presión fiscal y eso hace que los costos fijos se vean incrementados”, indicó.
Al mismo tiempo, el titular de la entidad comercial sostuvo que hubo una caída en las ventas de alrededor de un 6 % si se compara febrero de 2016 con el mismo mes de 2015. “Aunque pareciera poco, es importante en este momento para un comercio”, dijo. Aunque quizás la explicación haya que buscarla en la última inundación y la ausencia de los ingresos que dejan los turistas durante enero y febrero.
Aunque el presente es poco promisorio, en los comercios no piensan despedir empleados. Al menos, es lo que manifestó Kleiman. “Tratamos de esperar y aguantar un poquito a ver si esto cambia y mejora pero obviamente por ahí uno piensa que las fuentes de trabajo peligran cuando hay menores ventas Y por el contrario, cuando hay mayores ventas, se toma personal”, explicó.
“Salto Grande se hizo para desarrollo regional”, dijo Rotman. Entre los objetivos fundacionales se encuentra el de agua corriente y sanitaria, navegación y energía. “Lo único que se cumple es que se produce energía y cara”, acotó. La represa produce el 15 % de la energía que se consume en todo el país. “Y nosotros que estamos a 15 km debajo de la represa pagamos la luz más cara que en Buenos Aires”, dijo. Antes de que se quitasen los subsidios, según Rotman, la vivienda más humilde de Concordia pagaba la luz más cara que un suntuoso departamento en Puerto Madero o Recoleta.
En ese sentido, dijo que el peaje que se le cobra a la CEC se suma al costo de la misma, además de los impuestos provinciales y locales. “Creo que hay que tratar de lograr con las fuerzas vivas y con la parte política que la luz por lo menos no se cobre el peaje”, opinó el diputado. “Estamos a 17 kilómetros, tenemos subestaciones. La luz que sale de Salto Grande la bajan en las subestaciones”, indicó.
Rotman señaló que no es una “utopía”, “Tenemos que volver a las asambleas o reuniones donde esté la sociedad porque metido cada uno en su casa no vamos a lograr nada. Movilicémonos y hagamos lo que tengamos que hacer en beneficio de todos”, exhortó.
Rotman dijo que, hasta ahora, la represa trajo “muchos perjuicios” -como la inundación de miles de hectáreas productivas y la situación de desocupación de quienes que habían llegado para trabajar en la represa- y “algunos beneficios”. Entre los objetivos de la represa se menciona el desarrollo de la región. Y para atraer empresas se necesita ofrecerles ventajas comparativas. Una de ellas es la energía a precios promocionales. “Salto Grande fue hecha para que tengamos energía un poco más económica que en otros lados porque nosotros la generamos”, dijo. “Llegó el momento: esta es una pelea de todos”, dijo por último el legislador.
