La determinación del Estado afecta a uno de los sectores más vulnerables, jubilados y pensionados. En línea, al estar imposibilitados de pagar sumas importantes para obtener el tratamiento, se generó un cuello de botella en los hospitales públicos.
Por Ley, el paciente tiene garantizada su medicación sino cuenta con obra social o prepaga a través del Banco Nacional de Drogas Oncológicas. Sin embargo, su entrega regular enfrenta retrasos y faltantes según admitió el organismo estatal.
Al igual que en septiembre pasado cuando se detectaron los primeros síntomas de este problema, Gorla explica que "se habilitó otra vez al Servicio de Oncología a priorizar la vida de nuestros pacientes y garantizar el acceso y continuidad de los tratamientos que se requieran respetando, además, los plazos que establecen los Médicos Oncólogos".
En verano, suele ocurrir una disminución en la demanda de medicamentos, este año, ya notamos un aumento de pedidos y cada vez son más los que vienen a la ventanilla de Farmacia a retirar sus drogas", suma Marcela Correa -MP608-, integrante del Servicio de Farmacia y Esterilización.
El Servicio de Oncología del Centenario cuenta con más de medio centenar de tratamientos actualmente, de los cuales, un 70 % son pacientes hospitalarios, es decir que el propio nosocomio compra la medicación.
En términos económicos, Gorla indicó que significa "una inversión [no un gasto, aclaró] muy importante porque los tratamientos para quimioterapia superan los 100 mil pesos para un ciclo completo y una aplicación de drogas Monoclonales ronda entre 20 mil o 50 mil pesos, de acuerdo a su especificidad".
Finalmente, desde el Servicio de Farmacia y Esterilización, recalcan que los pacientes que no tienen cobertura social son abastecidos en forma gratuita desde el hospital, a través del Banco de Drogas de la Provincia. Sí desde el Banco no poseen en ese momento una medicación, es el propio Hospital quién la provee porque se cuenta con un resguardo para utilizar en la siguiente aplicación al enfermo y así se garantiza el acceso constante a la medicación oncológica.