Además, el funcionario propuso, irónicamente, que la reunión para resolver el conflicto entre ambos países se lleve a cabo entre el presidente Kirchner y el titular de Botnia, la empresa finlandesa que construye una planta de celulosa en Uruguay. “Kirchner se tendría que reunir con el presidente de Botnia porque son los únicos que tienen el poder”, para encontrar la solución, indicó el ministro del Interior.
No obstante, en línea con las declaraciones del canciller Taiana, Fernández criticó a la empresa Botnia por haber parado las obras únicamente por diez días. “Es un gesto casi burlón”, expresó. El acuerdo firmado en Chile por los dos presidentes determinaba que había que suspender la construcción de las plantas y los cortes de ruta por 90 días.