Pasadas las 20.30 comenzaron a concentrarse una considerable cantidad de uruguayenses en el frente de la terminal de ómnibus Francisco Pancho Ramírez para exigir a Schepens que dé marcha atrás con el intento de entregar el edificio público al ex funcionario menemista y empresario Miguel Marizza, ante la cobertura de sólo dos medios radiales de la ciudad y El Miércoles Digital como el único gráfico (tal como la de una semana antes).
Al ritmo del bombo y redoblante que hacían sonar los obreros municipales, la gente se fue sumando con su presencia y palmas engrosando la multitud, que superó ampliamente a la del viernes pasado. Durante el reclamo se hizo una colecta entre los presentes para poder costear los gastos de las próximas actividades. La recolección de fondos fue tan exitosa que en pocos minutos se juntaron 2.425 pesos.
Críticas a Schepens y Marizza
Las principales críticas fueron dirigidas al intendente por “no dar la cara” y “no escuchar a los vecinos”. En ese sentido, se resolvió enviar una carta firmada por los vecinos para exigirle que dé marcha atrás con el plan entregador. Bajo la modalidad de asamblea, los presentes fueron pidiendo el uso del micrófono, expresando su repudio a la iniciativa del scelzismo de privatizar la terminal y proponiendo acciones para profundizar el reclamo.
Dentro de lo resuelto se declaró a Marizza -por unanimidad- “persona no grata para Concepción del Uruguay”. La medida será acompañada con volantes, afiches y pasacalles para dejar en claro que es una persona repudiada por el pueblo uruguayense.
Amplio Reclamo
La gran concurrencia de uruguayenses incluyó a dirigentes y afiliados de la Asociación de Obreros y Empleados Municipales (AOEM) -encabezados por su titular, Mario Barberán-, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), y de partidos políticos como la Unión Cívica Radical (UCR), el Partido Socialista (PS) y el GEN.
También estuvieron presentes laicos de la Iglesia Católica, la Asamblea Ciudadana Ambiental, la Juventud Guevarista, la Agrupación de Educación Popular Claudio Pocho Lepratti, la Asociación Protectora del Mercado 3 de Febrero, estudiantes y miembros de los centros de estudiantes de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) y de la Universidad de Concepción del Uruguay (UCU), además de vecinos, comerciantes de diferentes barrios de la ciudad e incluso trabajadores de la propia Terminal.
Qué se dijo
Durante una asamblea popular que se extendió casi dos horas uruguayenses, representantes de diferentes sectores y vecinos de manera particular hicieron uso de la palabra, manifestándose en contra de las negociaciones ocultas entre el procesado ex funcionario menemista Miguel Marizza y el Departamento Ejecutivo Municipal (DEM) en torno a la Terminal, que revelaron el mensuario El Miércoles y este sitio, informando sobre el cruce de cartas documentos entre el ‘empresario’ y el intendente Carlos Schepens.
Cristina Tejedor, de la Asamblea Ambiental, rescató la experiencia de defensa del Mercado: “Pensaron que como ya habíamos conseguido salvarlo nos íbamos a olvidar de la Terminal”. En tal sentido, prometió: “Vamos a seguir luchando”.
En tanto, Sonia Mórtola, de la Asociación de Perjudicados por la Justicia (Aperju), indicó que desde el perfil de Facebook de En Defensa del Patrimonio Uruguayense se trabajará en la redacción de la carta dirigida al intendente de la que todos pueden participar haciendo aportes.
Oscar Muntes, secretario general de ATE Uruguay, destacó la importancia de “dejar de lado las mezquindades para unirse en este reclamo”, y remarcó que “ya no hay que tener más miedo, porque van a terminar de destruir el Estado”.
Por su parte, la concejala del Frente Progresista-Partido Socialista (FP-PS) Verónica Magni, única edil presente, resaltó: “Este es el momento del pueblo. Esto es una construcción de los partidos, los sindicatos, las organizaciones y de cada vecino y vecina que viene a participar y reclamar”. Además, recordó que presentó un pedido de informe, acompañado por los demás ediles de la oposición, y convocó a los presentes a acompañar el jueves próximo un pedido para constituir la banca del pueblo en el Legislativo local.
“Como ciudadanos no podemos permitir esto”, opinó, por su parte, Gabriela Montesino, presidenta de la Asociación Protectora del Mercado de Arte 3 de Febrero. Y recalcó: “Hay que exigirle al intendente que nos escuche. A nosotros, los artesanos, nunca nos quiso recibir. No escucha a nadie”.
José Pepo Artusi, dirigente radical, arquitecto y ex diputado provincial, explicó: “Se ocuparon de pretender engañar a la sociedad uruguayense y en parte lograron instalar algunas zonceras. Por ejemplo, no hay ningún estudio serio de que hay que trasladar esta terminal. Esta terminal está bien emplazada”. Señaló que “desde 1974, esta terminal casi no ha tenido mejoras”, y reclamó que “si hoy es un motivo de vergüenza para los uruguayenses debe volver a ser una motivo de orgullo, porque no necesitamos un casino electrónico para incentivar el turismo”.
Expresaron su rechazo a la entrega también la docente Cristina Laurencena, representando a la Agrupación Pocho Lepratti y Sergio Almada, en nombre de la Juventud Guevarista, recalcando ambos los perjuicios por la ludopatía.
Una vecina de la zona de la terminal contó que el abandono del lugar “hasta nos ha afectado la salud, porque se ha llenado de ratas”, y expresó su indignación: “El nombre de esta terminal (Francisco Pancho Ramírez) no es digno del abandono”.
Por su lado, un comerciante exigió que el Centro Comercial, Industrial y de la Producción (Cecom) se exprese públicamente “para que los uruguayenses sepamos de qué lado están y si convalidan que la ciudad sea robada”.
Otra vecina, que expresó su fe católica, propuso solicitar en las diferentes parroquias, capillas e iglesias de la ciudad que el tema sea incluido en las homilías para evitar que se siga propagando el juego y la ludopatía. La moción también fue aprobada y se realizará un relevamiento con los líderes religiosos de los diferentes credos.
También estuvo presente la voz de los estudiantes universitarios. Eugenia, alumna de Abogacía de la UCU, manifestó su indignación ante el intento de traslado de la terminal: “Nos va a costar mucho más viajar. Esto nos afecta mucho a los estudiantes que viajamos y que ya hacemos un esfuerzo para poder estudiar en esta ciudad. Además nos exponen al riesgo de la inseguridad de venirnos (caminando) desde la otra terminal”. Anabella, del Centro de Estudiantes de la Facultad de Humanidades, Artes y Ciencias Sociales de la Uader anunció que van a tratar el tema y visitarán “curso por curso par