Gorsky señaló que a pesar del impacto económico que deja la pandemia en la ciudad, “se ha registrado un bajo índice de morosidad por parte de los inquilinos”, y aclaró que aquellos que no han podido cumplir con el pago mensual “es porque realmente no estaban en condiciones de hacerlo por una baja o quita total de los ingresos”. No obstante, el empresario subrayó que los dueños han tenido una respuesta favorable con este tema y se pusieron a la altura de la situación inmediatamente. «Nadie esta apurando ni reclamando nada y fueron bastantes contemplativos con el tema”. De hecho, “salió de muchos de ellos bajar hasta un 20 % los importes mensuales en comercios y viviendas, justamente por la inactividad”.
En el mismo sentido, el martillero público comentó que los primeros días de abril “no hubo casi diferencia con otros meses en cuanto al pago del alquiler” y los problemas comenzaron a vislumbrarse en el pago del mes de mayo. “Ahí ya la cosa se complicó porque algunos cumplían un mes de inactividad o ingresos bajos. Y lo mismo ocurrió ahora, a principios de junio. Pero como dije, los dueños fueron muy solidarios con los contratos y se pudieron renegociar los puntos”
Ley de Alquileres
En cuanto a la nueva Ley de alquileres, que ya fue aprobada en ambas cámaras legislativas pero aún no implementada, Gorsky celebró que todos sus puntos están destinados a la protección del inquilino y resaltó los cuatro más importantes a su consideración: ‘La extensión del contrato’, que pasó de ser de dos a tres años; ‘Las actualizaciones y el aumento del monto anual’, que será el monto resultante del precio al consumidor y la remuneración imponible promedio de trabajadores estables; ‘La obligación de tener el contrato inscripto en Afip a la hora de hacer un desalojo’ y ‘La devolución del mes de depósito’, que antes ante era por el valor del primer mes de alquiler y ahora, del último.
Sobre la extensión del contrato, que pasó dos a tres años, el empresario sostuvo que definitivamente beneficia al inquilino al evitar la pronta readecuación del monto del alquiler y aclaró por el contrario, que supone un enorme problema para aquellos propietarios que tienen la intención de desalojar, ya sea porque decidieron vender el inmueble o porque lo necesitan para algún familiar o simplemente porque hay inquilinos que realmente son complicados en cuanto al cuidado del espacio. “Salvo por incumplimiento del pago o porque no se respeten las condiciones del contrato, el dueño nunca puede sacar al inquilino”, afirmó.
En este caso se da lugar a otro punto fundamental de la nueva Ley de Alquileres y es que todos los contratos deben estar inscriptos en la AFIP. “Este es un punto en el que yo no estoy de acuerdo porque los gastos que suponga este trámite seguramente será volcado al inquilino”, señaló Gorsky y aclaró: “La ley dice que si o si deberán estar inscriptos en la AFIP, pero dependerá de cada dueño si lo hace o no y eso es aparte de la relación con la inmobiliaria. Ahora, si a futuro tiene intenciones de desalojar, deberá inscribirse si o si”
Otra de las nuevas incorporaciones es el pago del mes de depósito: Actualmente el inquilino abona al momento de ingreso y como garantía un importe equivalente al primer mes de alquiler que será devuelto cuando la persona deja el inmueble. “La nueva ley dice ahora que al momento de terminar el contrato se le devolverá al inquilino un importe igual al último mes pago, que por supuesto es mucho mayor al que dejó de entrada”, explicó. “Hay que tener en cuenta que la ley está pensada más para Buenos Aires o ciudades grandes donde hay muchos abusos por parte de las inmobiliarias y propietarios respecto al depósito en garantía, mes de comisión y todo lo que se debe abonar sólo para ingresar. De hecho, otro punto a favor del inquilino en la nueva ley es que la comisión de la inmobiliaria se pagará ahora en partes iguales por dueños e inquilinos. Pero en Concordia el sistema es mucho más flexible y contemplativo y los contratos son para todos iguales”
Finalmente, Gorsky destacó la ultima incorporación de la ley y detalló que la actualización anual del precio de los contratos destinados a uso habitacional ya no será por un monto acordado en el contrato inicial, sino, que resultará de la base del índice de precios al consumidor (IPC) y la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables (RIPTE). “El porcentaje de aumento será el resultado de estas dos variables, pero por lo que concluímos nosotros no será muy diferente al importe que se maneja actualmente”, aclaró el empresario y agregó: “nosotros manejamos ahora un 12 % anual de aumento, creemos que será un importe mas o menos igual y que no habrá una gran variación, concluyó.
A Continuación, los puntos principales de la Nueva Ley de Alquileres
