En conferencia de prensa, Alfonsín analizó casi exclusivamente la situación del radicalismo a nivel nacional, en el cual hay distintas posiciones entre los gobernadores que se debaten entre quienes buscan un perfil opositor y otros que buscan alinearse con el Gobierno: “Esto querría decir que el partido les dice a algunos ‘ustedes vayan a la oposición’ y otros pueden ir al oficialismo, pero esto sería la disolución de la Unión Cívica Radical. Evidentemente, hay un momento difícil en el radicalismo”.
En este sentido, recordó que vivió en 1946 “las bajas que sufrimos en el primer Senado de la Nación, que estuvo integrado por muchos radicales, en la época del peronismo pero el partido se superó y quedó el tronco, que es el árbol”.
Consultado sobre si el destino del radicalismo ante la renovación de autoridades del 2007 es invariablemente optar por dos candidatos justicialistas como Néstor Kirchner y Roberto Lavagna, el ex mandatario apuntó que es algo que “tendrán que definir las autoridades de acuerdo a lo que se establezca en la convención (que se realizará el 25 y 26 de agosto en Rosario para discutir la estrategia electoral para las elecciones del año próximo). No se hablará de Lavagna, pero sí de un pronunciamiento fundamental y prográmatico, y la mejor forma completar eso será buscar una coalición para lo cual se establecerá un grupo de radicales que realicen las gestiones”
Al mismo tiempo, destacó que entre un candidato y otro hay “una diferencia abismal”. “Algo es la captación que se realiza de distintas formas, por obras públicas y apoyos electorales que puedan esperar algunos, y otra es la discusión institucional que se debe realizar entre los partidos. El Presidente de la Nación sigue llamando a los partidos políticos ‘corporaciones’ olvidando que son instituciones absolutamente indispensables de la democracia. Es totalmente distinta una situación de otra que permitirá que con distintos sectores vayamos poniéndonos de acuerdo”, indicó.
Mas Lavagna
En cuanto a Lavagna, Alfonsín sostuvo que su proyecto político le recuerda al caso de Romano Prodi, en Italia, que era un “hombre sin partido y de centro que fue apoyado por la izquierda democrática italiana: Lavagna se define bien como un hombre de centro progresista. Así apareció a través de su dilatada gestión al servicio del país. Sirvió a la nación durante mi Gobierno como Secretario de Industria y Comercio Exterior y lo hizo muy bien. Luego fue Embajador ante la Comunidad Económica Europea durante la época de la Alianza y luchó contra la política de subsidios de aquella. Luego, en la época de Duhalde nos sacó del pozo. Con Kirchner actuó con dignidad frente al FMI y también realiza un canje espectacular de la deuda. Es un hombre que da garantías con su propia historia de que tendrá un Gobierno realmente progresista con una seriedad que el país reclama”.
Por otra parte, el ex presidente criticó que actualmente la calidad institucional es “bajísima” porque “se ha lesionado la división de los poderes, tanto del legislativo como del judicial, y ahora se habla de una reforma que ha sido absolutamente negada por el Jefe de Gabinete (Alberto Fernández). Esperemos que sea así”.
En cuanto a la intención del alfonsinismo de sumar al radicalismo en una alianza compartida con el duhaldismo antikirchnerista que lleve al ex ministro Lavagna como candidato a la presidencia, Alfonsín señaló que el ex Ministro de Economía está “absolutamente decidido a decir que sí” pero si se niega “seguiremos adelante con quien quiera aceptar nuestras ideas”.