“Tal vez para esta gente sea signo de buen gobierno el empobrecer sistemáticamente a la población, achicar el mercado interno, abandonar las responsabilidades antes de concluir los mandatos o la inundarnos de bonos federales que tuvimos que soportar durante la última gestión radical”, reflexionó Albornoz.
“Benedetti tira números como en la quiniela. Se olvidó de jugar la redoblona del vencimiento de los Boden 2012 que se dieron a los depositantes por la pesificación y la conversión de dólares a pesos por la salida de la convertibilidad después del desastre de la Alianza, con el pago de los créditos del Estado nacional para rescatar los Bonos Federales en abril del 2003, una operación formalizada entre Montiel y Duhalde antes del recambio de autoridades. Esa redoblona es parte de la timba de esta gente que habla irresponsablemente, sin memoria y desfachatadamente”, resaltó el diputado justicialista.
“Semejante estrechez mental le impide al agrodiputado siquiera considerar el contexto mundial en el que se inscribe nuestra economía, así como le impide reconocer que el endeudamiento heredado por la provincia constituye un renglón complicado de sobrellevar para cualquier administración. Hace 8 años que Urribarri está en el gobierno, y hace referencia al costo de la deuda heredada que debe pagar este año el gobierno nacional, que sin dudas impone restricciones a todos”, explicó.
“Es falso decir que hemos dilapidado recursos. Desde el 2003 no hay fiesta, hay crecimiento con inclusión. Y que se saquen de la cabeza la idea de que este proceso se termina, porque tiene una enorme vida política por delante”, enfatizó Albornoz.
“Esta oposición tan escuálida, tan desinformada y mendaz, no nos hace cosquillas. Las declaraciones del poco útil empresario sojero no aportan ningún elemento al debate político. No propone nada. Dice que el gobierno que más ha transformado nuestra provincia en los últimos 30 años elude sus responsabilidades y se reduce a hacer anuncios rimbombantes. Definitivamente este es un hombre que vive adentro de un silo bolsa”, ironizó Albornoz.
“El malogrado candidato a gobernador radical debería ser más respetuoso para con quien ha recibido semejante apoyo popular en las últimas elecciones. Es una mentira enorme pretender que Urribarri sea mezquino o eluda sus responsabilidades, cuando la ciudadanía lo valora por su generosidad y compromiso permanente. Tal vez la única posibilidad que le quede para aparecer en los medios sea esperar algún reflujo destituyente de sus amigos monocultivistas, porque si es por la política o la numerología, Benedetti está al horno con papas”, finalizó Albornoz.
