Indigna desde el anuncio, en primer lugar, porque le hace el trabajo sucio al neoliberalismo local, que, al igual que en el resto del mundo, se va transformando aceleradamente en una versión aggiornada del fascismo, En todo caso si el problema son las noticias falsas que se difunden en la red, con el objeto de perjudicar al oponente, no es necesario crear nuevas leyes, ya existen, y mucho menos mecanismos de censura que obviamente serán aprovechados poralgún gobierno neoliberal, que eventualmente pueda venir, para reprimir la opinión popular, con la yapa que sentirá que tiene ‘tierra liberada’ porque utilizará mecanismos creados por un ‘gobierno popular’ (SIC)
Y también en porque la frase ‘bien común’ acuñada y utilizada a discreción por el fascismo católico, no esconde su origen en la derecha de una secta, el Opus Dei, que hoy está siendo cuestionada por esa misma grey religiosa, por su visión clasista, soberbia y aristocrática, de la doctrina de Jesucristo.
¿QUIEN VA A DETERMINAR LO QUE ES PARA MI ‘BIEN COMÚN? ¿EL OPUS DEI, BÉLIZ? O EN EL FUTURO, ALGÚN DURÁN BARBA DE LA DERECHA NEOLIBERAL.
Me pregunto qué valores entrarán en el ‘bien común’ y cuales no, y quién lo decidirá, el ‘bien común’ así, a secas, no es ni más ni menos que la ideología del que se encarame al gobierno y disponga de este mecanismo que quiere instalar el ‘buenazo’ de Béliz. Un personaje obscuro, del que se podría decir lo que decían los tangueros tradicionales cuando apareció el maravilloso Astor Piazzola: ‘Todos dicen que es bueno, pero nadie sabe por qué, porque nadie lo entiende’.
CERRUTI:NO ACLARES PORQUE LA EMBARRAS CADA VEZ MÁS
Ante los embates que surgen de todos los sectores políticos por la peregrina idea de instalar la censura en las redes sociales, la vocera presidencial, Gabriela Cerruti, salió a aclarar, confundiendo más: “Redes para el ’bien común’ es un programa del Consejo Económico y Social que nace a partir de la adhesión de la República Argentina al Pacto por la Información y la Democracia impulsado por Francia y Alemania” Una frase, ambigua si las hay, Cerruti dice que el programa ‘nace’(SIC) de Reporteros sin Fronteras, Alemania y Francia, como si estos países y periodistas avalaran las ideas, no explicitadas, del el secretario de Asuntos Estratégicos (SIC) de la Nación, un cargo inventado a la medida de este personaje que claramente tiene soporte en intereses ideológicos inspirados en la derecha católica.
El comunicado oficial abunda en información confusa: ‘El trabajo es realizado con el asesoramiento del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) (SIC), 40 universidades (RECONTRASIC), y liderado por una de las consejeras, Marita Carballo, miembro de la Academia de Ciencias Morales y Políticas(¿?).Y pone como garantía de calidad democrática de lo que piensa Béliz, de lo que es el ‘bien común’que: “Los Estados firmantes, entre ellos Alemania, Francia, Reino Unido, España, Italia, Bélgica…”O sea, los países, miembros de la OTAN, que han bloqueado toda la información de los medios vinculados a Rusia, para imponer su opinión unilateral sobre la guerra desatada entre ese país y Ucrania.A buen entendedor, pocas palabras.
“Vamos a profundizar los lineamientos centrales del uso de las redes sociales para el bien común”, dijo Beliz en una nueva convocatoria del CES, en el Centro Cultural Kirchner.“Estamos trabajando con un estudio pionero que marca y propone un pacto para el buen uso de las redes sociales y que dejen de intoxicar el espíritu de nuestra democracia”, sostuvo Beliz. Conceptos que podrían haber sido formulados en su momento por Goebbels, quien sin duda los suscribiría con una sonrisa sarcástica.
Beliz hablando del control de las redes sociales para proteger ‘el bien común’ me suena a la idea, siempre cara a los fascistas, de que existen individuos superiores, moralmente hablando, que nacen con la misión divina de custodiar los ‘valores morales, para imponer el bien común, entre lo que obviamente se encuentra él: el ‘buenazo de Béliz’. Y del otro lado nosotros, los flojitos de moral que formamos nuestras opiniones en base a las fake news de las redes sociales.
Que Yaguaruguazú nos libre de estos auto ofrecidoscustodios del ‘bien común’; ya los conocemos, la historia ha sido muy generosa en proponernos estos esperpentos salvadores de la moral y las buenas costumbres occidentales y cristianas.