En diálogo con el programa Secreto de Sumario, que se emite por Radio 10, Fernández dijo que "no quiere ser parte de la decisión de la sociedad que se hace la distraía" y pidió que el gobernador macrista Gerardo Morales "se dé cuenta de que esto es un atentado al Estado de Derecho".
"He vivido en una sociedad que durante muchos años vio que gente era desaparecida, detenida, matada y se exiliaba, y todos tomaban una actitud pasiva, pensando que el problema era del otro, que algo había hecho y sin involucramiento permitía los abusos del Estado, era años de la dictadura", recordó, y remarcó que "en la Argentina todavía hay vicios de arbitrariedad que no debemos dejar que crezcan, que pasen".
"A Milagro Sala la vi una vez en mi vida. No comparto su visión política, pero también sé que no tiene por qué estar presa. Cuando reacciono es porque no quiero ser parte de aquella sociedad que se benefició con la dictadura mientras otros la parecieron. Tampoco quiero que el Estado de Derecho se vea resentido por las decisiones que se están tomando en Jujuy", enfatizó.
En esa línea, destacó que en el país rige "el principio de inocencia" y que una persona tiene derecho a estar en libertad mientras el proceso se desarrolla. "Por qué Milagro Sala está presa y (Sergio) Schoklender, que investigado por hacer viviendas que finalmente no se hicieron, no está detenido? ¿Por qué los intendentes por donde pasó el dinero de Milagro Sala para viviendas no están imputados? La única explicación es que existe una clara animosidad del poder político de Jujuy sobre Milagro Sala para someterla y mandar un metamensaje a los opositores para decirle: ojo con quién se meten, que les puede pasar lo que le pasa a Milagro Sala", sentenció.
"No estoy en Jujuy por compartir su visión política, ni por ser su socio político. Estoy a acá para preservar el Estado de Derecho porque cuando una persona está injustamente detenida una sociedad como tal debe sentirse resentida", remarcó.
Sala fue detenida el pasado 16 de enero y condenada esta semana a partir de una denuncia de Morales en la que la acusó de ser la instigadora del "escrache" que sufrió en octubre de 2009, cuando era senador nacional y le tiraron huevos durante una actividad en el Consejo Superior de Ciencias Económicas en la provincia. Pero desde abril se la investiga por el presunto manejo irregular de fondos públicos destinados a la construcción de viviendas populares.
Además, es investigada por presunta "evasión fiscal y enriquecimiento ilícito" y suma una acusación por "encubrimiento de tentativa de homicidio", y por "instigación a cometer delitos y tumultos en concurso real", tras la denuncia del Ejecutivo provincial por "amenazar de muerte a dos policías", el 13 de octubre de 2014.
