Seguridad y droga son los dos temas que mayor preocupación generan en forma natural, explicó Servín. Pero hay un “montón de costados” desde donde abordar ambos tópicos, Uno de ellos es la escolaridad primaria. “Notamos un abandono; un incremento de la inasistencia”, indicó el párroco, quien aseguró que tiene algunos proyectos en mente para el próximo año. Por ese motivo estuvo presente el titular de la Dirección Departamental de Escuelas.
“Cual es la suerte de esos chicos que se quedan sin escuela” se preguntó. “Parece que algunas cosas las internalizamos, las normalizamos y no nos escandaliza. Pedí a dos políticos locales una política agresiva de escolarización similar a la que se hace con el dengue. La conclusión a la que llego es que no es prioritaria cuando salud y escolarización son prioritarias y además la escolarización es ley”, enfatizó.
Pero no hubo ningún representante, tanto de de la municipalidad como de la Jefatura de Policia. “Ayer estuvieron a los tiros”, indicó Servín y lo que más le preocupa es que las balaceras “ya no llaman la atención”. Asimismo dijo que la presencie policial sigue siendo “disuasiva” pero los acontecimientos no cambian de rumbo va llegar a un momento que la presencia de un patrullero “no va a ser disuasiva”.
El cura aseguró que estuvo con el intendente Gustavo Bordet en la Plaza Urquiza el fin de semana largo del 12 de octubre cuando se colocó una placa recordatoria en el reloj de sol. “Le dije que habíamos solicitado una audiencia y me dijo que ese lunes era feriado pero para el 15 o 16 (de octubre) nos iba a citar. Le dejamos carpeta con la carta pero hasta ahora estamos esperando la invitación”, señaló.
Por aguardar la respuesta al pedido de audiencia, los vecinos no quisieron llevar a cabo la reunión. Pero además porque se vivía un tiempo electoral. Servín explicó que no querían que se interprete de otra manera la situación. No obstante, las elecciones ya pasaron y los problemas siguen vigentes.
