Ahora descubren que faltan 13 mil kilos de leche del galpón del Ejército en Paraná

La investigación abarcó los depósitos que la provincia todavía conserva en los galpones del Ejército Argentino en Paraná, y consistió en el arqueo del stock existente y la comparación entre lo enviado por la Nación y las entregas realizadas.
El resultado fue la desaparación de unas 13 mil cajas, aunque el informe no avanzaría en despejar los interrogantes sobre el destino de los alimentos. “No se sabe si fueron destruidos o distribuidos sin que conste en registros o… qué fue de esa leche”, confió a EL DIARIO una fuente que tuvo acceso a la información.
El informe, que llegaría formalmente hoy a las manos del secretario de Salud, Juan Abolafia, daría cuenta de otras “irregularidades”, relacionadas a la gestión de Degani, pues el área dependía de esa cartera.
Esta Hoja consultó anoche a Abolafia, quien se excusó de confirmar la información hasta conocer el contenido del documento elaborado por el área de Velázquez. Al respecto, estimó que el escrito le sería entregado mañana, aunque no descartó que pueda adelantarse para hoy.

PLAN.

El Programa de Apoyo Alimentario Materno Infantil consiste en la provisión de leche, mediante los centros de salud y hospitales y previa receta médica, a niños hasta los 5 años y 11 meses, embarazadas y nodrizas hasta los 6 meses de vida de los recién nacidos. La población asistida contempla a chicos con bajo peso y embarazadas con serias dificultades socio-económicas, explicó Abolafia.
Para el sostén del plan, la Nación envía leche en polvo —no la partida para su compra—, distribuyéndose en la provincia unos 46 mil kilos por mes con un cálculo aproximado de beneficiarios de unos 26 mil (ya que hay casos a los que se les entrega dos cajas cada 30 días).

CUÁNTO.

La desaparición de las 13 mil cajas se suman a una lista escandalosa de pérdidas de alimentos, que la provincia debía destinar a la familias pobres. Así, la cantidad de mercadería destruida ascendería a unos 60 mil kilos, si se considera que a medidos de junio el Gobierno dispuso la quema de 5 toneladas de alimentos vencidos y se repartieron, al menos, otras 3,5 toneladas para que la población carente “aproveche” de alguna forma esas remesas.
Después, en la primera semana de julio, se procedió al enterramiento de unos 40 mil kilos de productos, luego de que áreas del Estado comprobaran que la mercadería no estaba en condiciones de ser consumida debido al accionar de roedores en los depósitos del Ejército.
Ahora, se suman las 13 mil cajas de leche, que si bien hasta anoche no se conocía cuál había sido el destino, se supo que la partida no formó parte de los 40 mil kilos sepultados bajo tierra. Así lo confirmó a EL DIARIO, Jorge Kerz, coordinador de la Ejecución y Control de las Políticas Sociales de la provincia, quien se mostró sorprendido por la noticia y dijo que esa mercadería no formó parte del grupo inutilizado en julio.
Lo cierto es que ante este nuevo hallazgo sería insuficiente el monto estipulado por el Gobierno, respecto de la pérdida económica producida por la mercadería desechada. El costo fue estimado en 35 mil pesos —dinero que está siendo reunido entre legisladores y funcionarios—, aunque nunca se informó oficialmente sobre la cantidad exacta de los productos desechados. Como tampoco hubo informes oficiales, respecto de productos vencidos distribuidos.

Buscan dónde depositar la leche

LA DIRECTORA DE MATERNIDAD E INFANCIA.

Sonia Velázquez, inició la tarea de búsqueda de un depósito adonde llevar la leche correspondiente al plan materno infantil que se nutre de los envíos que realiza la Nación. Hasta ahora, esos alimentos están guardados en el galpón del Ejército Argentino al que Bromatología desestimó por no reunir las condiciones requeridas. Según dijo Velázquez, la Nación exigió que la guarda de la leche que envía —durante el primer año y medio de la actual gestión fueron 596.461 kilos— se haga en forma separada al resto de los alimentos que se destinan a la ayuda social. Pero además, desde el gobierno central han reclamado que se eleve un informe detallado de la cantidad de leche distribuida, y lo que resta entregar. Por eso, este lunes un equipo de tres empleados designados por Velázquez asumió la tarea de conteo de las cajas de leche existentes. “Estamos buscando alquilar un depósito propio para la Dirección de Maternidad e Infancia. Buscamos mantener una administración propia, y un programa de stock de modo de llevar un estricto control de salida y entrega de la leche”, afirmó.

Entradas relacionadas