Según lo charlado con otros integrantes del gremio docente, están de acuerdo en modificar la conducta del alumno sin castigarlo con amonestaciones. En ese sentido Mecca lo comparó con el castigo mediante tareas comunitarias impuesto en Tribunales denominado “probation”. “Cuando alguien comete una falta, el abogado defensor pide la ‘probation’, que es ir a cumplir tareas sociales en algún hogar”, explicó.
En la escuela, el joven que comete una falta debería repararla ayudando “en lo que ha roto o por lo menos que logre el arrepentimiento y cambie su conducta”.
Mecca sostuvo que tiene conocimiento de que en algunas escuelas ya se ha aplicado algo parecido a lo planteado. “La de tratar por el consenso porque estamos educando jóvenes. Siempre tiene que haber la posibilidad de un resarcimiento siempre y cuando esté el arrepentimiento en el joven y el compromiso del cambio de conducta. También podemos implicar ahí a los padres y a los otros compañeros”, sostuvo el secretario de Educación.
“No estamos de acuerdo con otra época en que se castigaba con medidas un tanto represivas y eso por ahí no era conveniente para cambiar de conductas”, añadió. Además descontó que el tema debe estar siendo tratado por los vocales del Jurado de Concursos y del CGE como para Agmer tenga una opinión un poco más formal, más orgánica. No podemos dejar de estar de acuerdo con este tipo de medidas”, sostuvo.