Daniel Costa, responsable de una agencia de viajes chajariense, coincidió parcialmente con la información brindada a este medio la semana pasada acerca de que para Semana Santa la ciudad ya tenia un 100% de reservas. En ese sentido, prefirió ubicar el nivel de las mismas “en un 80 u 85%”.
Pero además, se refirió particularmente al denominado “turismo emisivo”, es decir, desde esta zona (Chajarí, Villa del Rosario, Federación, Santa Ana, zonas de influencia) a otros lugares. Dicho de otro modo, cuanto dejaron de salir de vacaciones –por lo menos a través de agencias- los vecinos de estas ciudades. “Teniendo buenas ofertas y todo, cero. No se ha vendido nada (para Semana Santa), expresó. “Por ahí saldrá la gente en sus autos particulares, pero nada que ver con las consultas o solicitudes que teníamos en Semana Santa del año pasado”, comparó.
Asimismo, ejemplificó que “personalmente hemos cotizado (en su empresa) alguno viaje a 500 dólares menos de lo que estaba un mes y medio o dos meses atrás” y “ni así hubo consultas ni interés”.
Esto no sería mas que la acentuación de algo que ya se vivió desde comienzos de año, ya que el movimiento del mercado de venta de paquetes turísticos desde la zona hacia otros destinos en la reciente época estival disminuyó. “Se trabajó, pero tampoco fue un boom”, calculó Costa. En ese sentido, estimó que la baja de las ventas de tours o pasajes para la gente de la zona “fue de entre un 15 y un 20%” con respecto al verano 2008.
Consultado sobre cuales podrían ser las razones por las cuales la gente de la zona obvió optar por la compra de paquetes turísticos, el empresario arriesgó que “primero, no hay una costumbre.” “Segundo, creo que al presentarse un panorama de crisis –que acá en la zona no podemos decir que haya llegado- se genera como paranoia. Y lo primero que ocurre acá en la región es guardar la leche”.
Por ultimo, no dejó de resaltar que le llamo mucho la atención que “aparecieron las tarjetas de crédito a mansalva. Se pagaban con dos o hasta tres tarjetas de crédito un mismo pasaje. Esto evidencia la falta de dinero y me trae preocupación porque, siendo realista o visionario, podemos llegar a ver un colapso de las tarjetas de crédito como pase hace algunos años”, señaló.
