Adolescentes y el lenguaje secreto en las redes sociales

El lenguaje es amplio y complejo. En algunos debates, a veces un poco estériles, se pretende encasillarlo en las leyes de la Real Academia Española y como sociedad nos enfrascamos en: lenguaje inclusivo sí o lenguaje inclusivo no. Lenguaje no binario sí, lenguaje no binario no…etc.

Pero la realidad impone palabras que usamos y escapan a las leyes de la RAE. Palabras cargadas de sentimientos, de posturas ideológicas, de contenido histórico. Palabras con peso propio.

Decía Roberto Fontanarrosa en su recordado discurso ante el Congreso de la Lengua (2004) “Ahora, yo digo, a veces nos preocupamos porque los jóvenes usan malas palabras. A mí eso no me preocupa, que mi hijo las diga. Lo que me preocuparía es que no tengan una capacidad de transmisión y de expresión, de grafismo al hablar”

El tema es cuando no sabemos nada de nada, de las palabras. Eso suele pasarles a los adultos cuando intentan entrar en el mundo del lenguaje de las jóvenes generaciones. Sabido es que, los y las adolescentes, gustan de usar códigos que les adultos no entiendan. ¡Quién no recuerda sus propios códigos de época!

Hoy, las redes sociales dejan en evidencia muchas de esas palabras, que si bien son acrónimos[1] forman parte del mundo del lenguaje de las y los chicos que, como adultos, no deberíamos ignorar.

Algunas, poco a poco van llegando a nuestro diario expresar, “bullying – ciberbullying – sexting-grooming”, pero cierto es que nos cuesta definirlas, a veces las confundimos y otras no tenemos ni idea de a qué hacen referencia.

En todo caso nuestro límite puede llegar hasta ahí, pero en el mundo del léxico infanto-adolescente hay palabras como: GNOC –GYPO – SUGARPIC – 53X o CU46, las que podemos ver escritas en un chat o en un comentario de nuestros hijas e hijos.

La doctora en psicología Teresa Sanchez-Gutierrez expresa “Utilizar hoy términos como ‘ASAP’, ‘random’, ‘shipeo’, transmite que se usa las redes sociales, se está al día y a la moda, y está al nivel de los mejores “influencers” a los que dar like”[2]

Si hablamos de “malas palabras”, aquí sí sería bueno saber que significan:

-CNOC (‘desnúdate frente a la cámara’)

-GYPO (‘quítate los pantalones’)

-SUGARPIC (petición de una foto sugerente)

-53X o CU46 (‘nos vemos para tener sexo’)

-1174 (‘nos vemos en la fiesta’)

-420 (marihuana)

-CID (ácidos y drogas)

 

Son muchos los acrónimos que se utilizan para esconder insultos: THOT, HOE, BOSH, SBW, SLUB, todos ellos con un mismo significado (zorra-puta) y, generalmente van dirigidos a niñas y adolescentes mujeres.

La razón de este uso no solo tiene que ver con un sentido etario de rebeldía, de código de edad, sino que incorpora además peligros y riesgos que los y las adultas debemos conocer para detectar cuando, aquellos niños-niñas y jóvenes que debemos cuidar, educar y orientar están en terreno peligroso.

 ¿Dejaríamos que estos entren solos o solas a una fábrica de herramientas cortantes de acero, con las máquinas funcionando, autorizándoles a tocar todo lo que quieran? Calculo que no, aun teniendo 16 o 17 años, pero eso es lo que hacemos cuando les dejamos solos ante las redes sociales, sin tener la más mínima idea de que sucede ahí adentro. Sin conocer de qué va la cosa, sin hablar al respecto, sin advertir las consecuencias.

Es llamativo como la RAE se preocupa por el uso de la e, en el lenguaje y no se ocupa del uso de los acrónimos en las redes sociales a la que acceden los y las niños y adolescentes.

Más llamativo aún es que el común de las personas se enfrasque en debates sobre el uso adecuado del lenguaje, sin prestar atención al significado de códigos generacionales que inducen a conductas, que pueden ser de altísimo riesgo para los más chicos.

Las palabras no son malas ni buenas, en sí mismas, lo malo o bueno son las consecuencias que su uso inadecuado puede generar, con interpretaciones erróneas. Es responsabilidad de los adultos que educan, cualquiera sea su rol (padre, madre, tío, tía, profesor, maestra, abuela, abuelo) saber primero qué pasa cuando se está “stolkeando” (acoso que intenta controlar la conducta de una persona) o “troleando” (dar a conocer en las redes mensajes ofensivos, para minar la imagen de una persona), qué efectos tiene esto sobre las conductas y las emociones. Luego advertir de ello a los y las más jóvenes, como le advertiríamos al entrar a la fábrica de herramientas de acero, y en lo posible acompañarles.

 

Lic. Verónica R. López

Tekoá Cooperativa de Trabajo para la Educación

 

[1] Los acrónimos son palabras formadas por siglas o abreviaturas. Cada sigla o abreviación representa una palabra, es decir, agrega un significado. Por ej: AFA, INADI, ESMA

[2] https://www.lavanguardia.com/vivo/mamas-y-papas/20210819/7652985/redes-sociales-hijos-lenguaje-secreto.html

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