La ordenanza N° 24447, promulgada en octubre de 1989, declara en el capítulo II como zona inundable de utilidad pública a recuperar a “todos los terrenos ubicados en la franja ribereña y arroyos hasta la cota 14 del Puerto de Concordia”. En ese sentido, se clasificó a diversas áreas: “b1) Área de recreación: destinada a conformar en el futuro un parque ribereño que contemple actividades recreativas y sociales; b2) Área de producción: destinada únicamente a su explotación laboral, dando preferencia a actividades forestales, extractivas del suelo (horno de ladrillos, alfarería, etcétera) itícolas, etcétera, en cuya reserva tendrán especial prioridad las familias inundadas que se erradiquen del lugar y siempre que estas actividades no requieran asentamiento de población permanente”.
Una de las familias evacuadas al galpón que pertenecía a la firma Bagley, ubicado en la esquina de Rivadavia y 9 de Julio, tiene su vivienda en calle Sara Gastelacoto, entre el Club Regatas y avenida Castro. El agua que cercó la viviendas no fue a causa de la crecida del río sino la del arroyo Manzores. En cambio, otras dos familias debieron “correrse unos metros más arriba porque estaban muy sobre la costa” debido al ascenso de las aguas del Uruguay. Ambas viven cerca de la parte sur de la playa Nébel.
“Hay una disposición municipal al respecto pero evidentemente la gente por necesidad de hacer su vivienda asumen estos riesgos. Hay muchas personas por debajo de la cota 14. Es más, tengo entendido que superando los 12 metros afectaría a muchas personas pero no sobre la costa sino en la zona del Manzores y en la zona del Ayuí», dijo el prefecto.
Justamente, en la zona de Colonia Ayuí, debido a la subida del Ayuí Grande, Defensa Civil trabaja con algunas familias. Pero la zona mencionada se encuentra fuera del ejido de Concordia y la ordenanza mencionada no tiene validez en esos casos.
El pico ya llegó
“El río se mantendrá en estas condiciones y lentamente tendrán que descender las aguas ya que al norte en los puertos donde está Prefectura de San Javier hasta cerca de Paso de Los Libres el río está bajando. No hubo aportes importantes ayer de lluvias por lo tanto creemos que no habría mayores inconvenientes. Si no hay lluvias tendría que tomar su cauce normal en los próximos días”, expresó. Aunau sostuvo que la bajante debería verificarse en un plazo de entre siete y diez días, que es lo que tarda en trasladarse el agua desde ese punto del río hasta Concordia. “Mucho depende de la corriente”, expresó.
En tanto que el movimiento en el Puerto no se ha interrumpido. “Si bien el muelle está en un 70 % bajo agua, tiene toda la parte del coronamiento del puerto dentro del Manzores y el astillero que no tiene ningún inconveniente”. En consecuencia, la lancha de pasajeros que diariamente cruza a la vecina ciudad de Salto funciona sin interrupciones.
