El grupo de los menores, propietarios del pool ubicado en la Cortada 77 y familiares de los mismos, acusaba a los segundos de ser los supuestos autores del robo de una caja registradora y una cortadora de fiambre que se produjo el día anterior en horas de la mañana en el local comercial. Los dos mayores, enterados por los vecinos, fueron a aclarar que no tenían los elementos sustraídos ni relación con el hecho.
Pero luego de intercambiar amenazas el clima se caldeó hasta que comenzaron las agresiones y los disparos. Alertados por los vecinos, acudió un móvil de la 1º hasta el lugar donde halló a los dos heridos. De inmediato se abrió una causa de oficio y los investigadores buscan a los dos mayores quienes se dieron a la fuga sin dejar rastro.
En relación al hecho la Policía secuestró un revolver calibre 38 mm. sin marca visible con cuatro cartuchos percutados. El arma había sido utilizada en el hecho de sangre y fue traída hasta la seccional policial por una mujer que alegó haberla encontrado tirada.