En otras palabras, hay una línea que hoy pone de un lado al Gobierno y los intereses populares y del otro a los grandes grupos económicos y las clases dominantes del conservadurismo y la derecha, representados en lo ideológico – y muchas veces en lo económico también – por el grupo Clarín y sus “derivaciones” mediáticas y políticas. Esa línea imaginaria ubica del mismo lado que Néstor y Cristina Kirchner a San Martín, Moreno, Artigas, Rosas, Perón, Evita y tantos más que dieron lucha en sus acciones y pensamientos desde el campo popular y por una Argentina libre y soberana. Esta continuidad histórica puede rastrearse desde 1810 hasta hoy, al mismo tiempo que pueden notarse claramente los antagonismos que esta lucha hubo de afrontar.
Es decir, el presente marca claramente la consolidación de un proyecto que comenzó hace una década, pero que se comprende mucho mejor desde la perspectiva de un legado ideológico que atraviesa casi 200 años de luchas y desencuentros. En otras palabras, hoy estamos ante la oportunidad histórica de profundizar estos cambios y sentar las bases de un nuevo país. Todos los indicadores positivos de la década ganada dan cuenta de esto.
Por supuesto, este punto de vista induce una doble lectura. Por un lado señala la lógica detrás de los ataques cada vez más duros de la oposición, las corporaciones, Lanata, el grupo Clarín, la Sociedad Rural, los que especulan con el dolar, los que apuestan al caos y la inestabilidad, los que intentan desestabilizar al gobierno, los eternos denunciantes que pronostican catástrofes a toda hora, y los sectores más duros de la derecha y los grupos de poder. Para ellos es una cuestión de supervivencia, a cualquier costo y de cualquier forma; es matar o morir en el intento. Por otro lado, esta manera de ver y pensar la actualidad denota también la enorme responsabilidad que enfrentan quienes asumen la defensa de este proyecto.
Por todo esto hoy, más que nunca, hay que salir a explicar lo que se hizo, el significado profundo que hay detrás de la Asignación Universal por Hijo; la Ley de Medios; la política de derechos humanos; el crecimiento económico; la defensa de la industria nacional; el mayor aporte presupuestario a la educación, las ciencias el deporte y la salud; la diversificación de los canales de opinión y expresión; la lucha en el campo de la cultura y el debate de ideas; la recuperación de empresas com YPF y Aerolíneas Argentinas; la restatización de las AFJP; la jubilación para todos; la regulación del servicio doméstico; el fútbol para todos; el protagonismo del Estado en diversos frentes; la integración latinoamericana; la democratización de la justicia, etc.
Hoy hay que salir a reivindicar, predicar y defender los cambios superadores de esta década, corregir lo que no se hizo bien y avanzar con lo que todavía no se logró; porque lo que está en juego es demasiado importante como para asistir solo como espectadores a este proceso histórico. Hoy, a diez años del comienzo de este proyecto y al conmemorarse el 203 aniversario de la Revolución de Mayo, renovamos nuestro compromiso militante de dar lo mejor de nuestra capacidad y esfuerzo, acompañando al Gobernador Sergio Urribarri y respaldando este proyecto nacional, para que esta década sea apenas el comienzo de una historia diferente y la refundación de una nueva Argentina.
