Urribarri expresó que “aunque respetemos la expresión del disenso, ni el justicialismo ni el gobierno pueden darle demasiada entidad a los dichos de un partido en extinción, que reemplaza con diatriba mediática su falta de inserción real en la sociedad entrerriana”.
Para el ministro, “cualquiera sean las dificultades que el gobierno enfrente y cualquiera sea la actitud que adopte, La sigla (tal la denominación que realizó del partido político) encontrará siempre un motivo para agredir y no para construir”.
Advirtió también que “la agresión y la denuncia mediática permanente es un camino sin retorno y así parecen haberlo entendido muchos de los dirigentes que han abandonado el partido, dejándolo solo en un sello que, lejos de expresar al progresismo argentino, ampara en la actualidad el sentimiento gorila de alguna izquierda de clase media de la Capital Federal y que algunos replican en la provincia”.
Requirió además que “La sigla exponga sus ideas concretas sobre cómo encarar cada problema con los que debe lidiar día a día este gobierno popular y los escucharemos pero no les vamos a dar a través de la confrontación mediática la popularidad que sus dirigentes han sido incapaces de construir ”. Finalmente indicó que sus dirigentes “no militan ni construyen. Sólo existen en los diarios”.