El secretario de Transportes de la Provincia, Daniel Paduán, adelantó que en poco tiempo más, la intención del gobierno es que retornen las verificaciones vehiculares. “Estamos poniendo en marcha un convenio con el CENT (Compuesto por la Secretaría de Transportes, CNRT Comisión Nacional Reguladora del Transporte y la UTN)”, explicó. Para que se pongan en marcha las verificaciones se firmará el convenio “en abril o mayo en Paraná”.
Los primeros vehículos que se llevarán a controlar a las verificadoras son los transportes de carga y de pasajeros. “Estamos de acuerdo en comenzar la verificación obligatoria en los talleres para el transporte de carga de jurisdicción provincial, transporte automotor de pasajeros, líneas de colectivo interurbanas, turismo provincial, servicio puerta a puerta y tráfico libre”, detalló.
Los lugares donde se llevarán a cabo las verificaciones serán los cinco talleres de revisión distribuidos en la provincia. “Hay uno en Paraná, otro en Concordia, dos en Concepción del Uruguay y uno más en Gualeguaychú,”, indicó. En cuanto al equipamiento de los talleres, Paduán aseguró que “se encuentra bajo custodia policial en Paraná. Antes del traspaso de gestión ya estaba allí”.
La otra novedad es que Paduán también adelantó que en el gobierno alientan la idea de retomar las verificaciones a los automóviles particulares, dependiendo de la marcha de la primera revisión. “La idea es implementarlo luego de algunos meses, a fines de 2005. Se empezará con Paraná, luego seguirá Concepción del Uruguay y después, Concordia”.
Paduán señaló que, en esta oportunidad, el “espíritu” de la iniciativa “no es recaudar sino mejorar el transporte”. Por ello, el arancel que deberían pagar los conductores sería: “racional, estamos hablando de $ 15 o $ 20”.
Para esa tarea, la provincia también pondrá en marcha los talleres móviles y convocará a la UTN (Universidad Tecnológica Nacional) y a las escuelas técnicas. Probablemente, a los autos con 25 años de antigüedades en adelante queden incluidos en la revisión en forma obligatoria.
Como un aliciente o un incentivo para que los conductores se inscriban, Paduán aseguró que “el costo de la revisión se puede acreditar para la última patente que deba pagar”.
«Vecino Alerta»
Si la provincia hace efectiva las palabras de Paduán, quienes se pondrán en alerta nuevamente son aquellos ciudadanos que motorizaron aquella campaña que tuvo éxito al paralizar las verificaciones. El ex-concejal Eduardo Miranda recordó la campaña que pusieron en marcha en febrero de 1998, cuando junto a algunos vecinos, se enteraron del sistema de verificación vehicular. “En ningún momento nos opusimos a que se controlen los vehículos en la provincia de Entre Ríos, a lo que nos oponíamos en forma vehemente es al negociado que había detrás”, expresó.
Miranda reconoce que hay automóviles que no pueden estar circulando “no solo en la ruta sino en la ciudad porque no tienen luces, frenos o cubiertas. Eso es un atentado contra la seguridad. Esos coches tampoco tienen la posibilidad de acceder a un seguro”.
El ex-edil recordó también que la revisación iba a ser exigida en forma anual. “el costo creo que era $ 54. Pero el secreto del negocio era que vos concurrías al lugar y te controlaban en forma muy minuciosa el tren delantero, los frenos, etc”. El control iba a efectuarse mediante computadoras, “donde te iban a detectar la más mínima falencia”, dijo.
En caso de encontrar una falencia, el coche sería rechazado. “Pagabas los $ 54 y tenías que volver en un plazo determinado por ellos con el coche reparado a pagar, no $ 54, sino una cifra menor pero igualmente irritante al bolsillo del contribuyente”.
Miranda recuerda también que había talleres ambulantes que “te podían parar en cualquier lugar de la provincia, requerirte la documentación que acredite la vigencia de ese control y, si era su intención, hacerte un control aleatorio”.
“Todo esto terminó con una marcha atrás de la provincia con un costo importante para todos los entrerrianos”, dijo, haciendo mención a la adquisición de los talleres por $ 4.650.000. “Sobre esto debe saber mucho la actual concejal Mireya López Bernis (Directora de Arquitectura y Construcciones en ese momento) que fue la que tasó los talleres y toda la maquinaria que se había formado para ese tipo de trabajo. Todo eso fue sobrevaluado”, indicó Miranda.
La denuncia
El Taller de Revisión Técnica Obligatoria que se encuentra en Concordia es uno de los que fueron instalados por las firmas ALESIA S.A. y TTI. Tecnología, Telecomunicaciones e Informática S.A.
La provincia los adquirió a un costo de $ 4.650.000. La adquisición motivó una denuncia de la ex-FIA (Fiscalía de Investigaciones Administrativas) presentada en el Juzgado de Instrucción N° 4, de Paraná. Quien fuese el titular de la FIA, Dr. Oscar Rovira, argumentó que hubo un “sobreprecio de las inversiones que habrían efectuado las empresas concesionarias”. En consecuencia, la compra fue “totalmente injustificada y particularmente onerosa para la Provincia”.
La denuncia también apuntó al ex-secretario de Reforma del Estado y Control de Gestión, Oscar “Pacha” Mori. En el dictamen, se consigna que el trámite de concesión del servicio fue “atravesado por graves irregularidades presuntamente delictivas cometidas por los mencionados y sus colaboradores, tendientes a asegurar a las firmas ALESIA S.A. y TTI. Tecnología, Telecomunicaciones e Informática S.A., no sólo el otorgamiento de un servicio que se pagaría con un canon elevado sino también, en su momento una indemnización exagerada, en perjuicio del Estado, por la rescisión del contrato”.