Accidentada asamblea en el Centro de Empleados de Comercio

El próximo 4 de junio, los asociados del CEC deberán decidir quien continuará al frente del gremio.
Las opciones son la propuesta que responde a Juan Manuel Roballo, actual secretario general, el cual cuenta con el respaldo de antiguos y cuestionados dirigentes, como el caso del Ricardo Castell, con el cual había estado enfrentado anteriormente.
En la vereda de enfrente esta el resto de la actual comisión directiva, encabezada por Juan José Simonetti. En rigor, quienes se hicieron cargo del CEC en los dos últimos años y quienes anoche habían logrado imponerse a la hora de encabezar la Junta Electoral.
Según explicó Simonetti al programa “La Kermesse”, los simpatizantes de Roballo se retiran “cuando se dan cuenta que en iban a perder la votación”.
La asociados enmarcados en la lista “26 de septiembre” propusieron una votación nominal directa, “para que queden los datos y la firma del asociado”, según afirmaron, “para garantizar la transparencia”.
Por su parte, Roballo y su gente “propusieron un voto secreto, sin firma y poco claro”, según la estimación de Simonetti. “Ellos lo que querían es que la gente se vaya, por eso cortaron la luz del sindicato, bajando la llave varias veces”. La situación tuvo ribetes escandalosos, que ni siquiera pudieron ser calmados con la presencia policial.
La asamblea terminó abruptamente cuando Roballo y sus seguidores se retiraron de la asamblea, con la gravedad que habrían sustraído “el libro de actas y el listado de socios de la institución”, denunció Simonetti, quien adelantó que se los denunciará “donde corresponda”.

Entradas relacionadas