Pasaron en limpio los eventuales competidores a la primera magistratura, nombrando a Laura Stratta, la anodina vice gobernadora actual; a Adan Bahl, quien a pesar de su cercanía con Bordet, no ha logrado insertarse en el interior de la `provincia; y a José Lauritto, que ya viene de vuelta en su recorrido político, con un deslucido desempeño en la CARU, un órgano que bajo su dirección continuó con todas las políticas instaladas por la gestión macrista, que significa en los hechos abandonar la defensa de intereses nacionales sobre el río compartido, que claramente esta siendo proyectado al servicio de los planes de las multinacionales que solo están interesadas en transformarlo en una ‘hidrovía’ (SIC) al servicio de la enajenación de commodities. Con el muy negativo impacto geopolítico y ambiental, irreversible, que esto significa.
Cuidadosamente ninguno de los dos nombró al verdadero ‘pollo’ de Bordet, para sucederlo, hablamos de Juan J. Bahillo, que no solo es el candidato del gobernador, sino también de los mentimedios y de los factores de poder de la economía concentrada, para quienes sería un verdadero triunfo de continuidad que la disputa a la gobernación se resuelva entre dos candidatos peronistas/pro, Frigerio y Bahillo, que garantizarían la permanencia de las políticas neoliberales que instaló Macri durante su presidencia, y que fueron acompañadas a rajatabla por Bordet y sus diputados.
Tanto Piaggio como Cresto eludieron efectuar críticas a la actual gestión de Bordet, incluso el concordiense, con indulgencia, habló de continuar ‘lo bueno que se ha hecho y corregir lo que se tenga que corregir’, aun a sabiendas que al que le toque ocupar el sillón de Urquiza, también le tocará enfrentar las dos enormes deudas que dejará el actual gobernador: en primer lugar la desesperante deuda social en una provincia que a pesar de los dones que posee, tiene un insoportable ranking de pobreza y miseria, llegando incluso de alojar en su territorio, dos de las ciudades con mayor pobreza del país, precisamente Concordia, de la que Bordet fue intendente en dos períodos; y Paraná, nada menos que la capital provincial, que ha sido la ‘casa’ de Bordet durante los últimos ocho años.
Y la segunda gran deuda que transferirá Bordet a quien lo suceda, es la deuda económica en dólares, que arteramente adquirió bajo el asesoramiento de Frigerio, en su doble rol de superministro de MM, e intermediario financiero de la usura internacional.
POR AHORA PIAGGIO Y CRESTO INTERCAMBIARON FLORES
Comprometiéndose a colaborar en el gobierno, en caso de ser el otro el elegido. Ambos eludieron referir ninguna crítica a la actual gestión provincial, quizás porque consideran que necesitan de la ‘caja’ del partido para hacer sus respectivas campañas. Pero asumiendo riesgos, porque la gestión de Bordet ha sido claramente deslucida y no ha satisfecho las expectativas que supo despertar en el electorado peronista. Aunque un tanto aliviados, porque luego de las revelaciones de Carrió, acerca de la verdadera cara del aspirante porteño a la gobernación, éste ha quedado impactado por el descrédito, que incluso no pudo revertir ni con la ‘bajada’ de ‘Heidy’ Vidal al territorio a tratar de lavarle los pañales sucios.
Por ahora Cresto luce como con más exposición, por su tránsito por la administración nacional, y el reflejo mediático que esto significa; y por pertenecer a la ‘casta’ concordiense, que ha manejado el PJ en las últimas décadas, pero eso, en determinado contexto, habrá que ver si en definitiva le suma o le resta. Piaggio por otra parte, no ha jugado sus cartas y su gestión en Gualeguaychú tiene un peso poderoso, que habrá que ver si logra instalar como antecedente válido en la provincia, algo que hasta ahora no ha ocurrido.
De cualquier manera, en un país en el que el largo plazo se mide a partir de los 30 días, todo puede suceder. Habrá que estar atentos.
