El presidente de la institución local afirmó que la evaluación de los últimos meses concluyó que el sistema eléctrico ‘está agotado’, y consideró que no es sólo por la falta de recaudación producto de la cuarenta, sino por la baja actividad económica en general que hace que los usuarios se vean muy complicados para abonar su cuota mensual. Al respecto, comentó que los funcionarios de la Cooperativa Eléctrica participaron de organismos nacionales donde se analiza la situación permanentemente y afirmó que esta preocupación está en todos lados. «Los números no cierran, a nadie. Y si no hay algún mecanismo que permita sobrellevar la situación, cada vez se hace más difícil pensar llegar a fin de año de manera equilibrada», subrayó. «Las maniobras económicas llegaron a un techo y es una realidad que nos toca a nosotros y a muchas otras actividades’.
Para hacer frente a la situación, Spinelli comentó que la Federación Argentina de Cooperativas Eléctricas (FACE) – de la cual forma parte la distribuidora concordiense – había elevado una propuesta para refinanciar la deuda con una tasa de interés diferencial y eliminando las multas. «Esta alternativa fue incluida en dos artículos dentro de la ampliación del Presupuesto 2020, pero el presidente Alberto Fernández los vetó a fines de agosto. Esto significaba un gran alivio y nos permitía proyectar a futuro, pero no se aceptó», lamentó.
No obstante, a pesar del panorama y la baja recaudación’ el directivo aclaró que «en Concordia no estamos tal mal’. Y agregó: «Seguimos con un muy buen nivel de servicio. Hemos tomado todas las previsiones para en estos tiempo difíciles poder seguir cumpliendo con lo que para nosotros es prioridad: el pagos de salarios a los trabajadores, reinversiones para sostener la redistibucion en óptimas condiciones y afrontar los gastos de proveedores locales, sobretodo, con el fin de ayudar al circuito económico de la ciudad». Pero, ‘el tema de las cooperativas es muy complejo y, salvo algunas que sos rurales y pudieron sostenerse, el resto pasamos dificultades», indicó.
«La preocupación tiene que ver con la situación en general. Pero la realidad es que muchas actividades necesitan y reciben la ayuda del Estado, como por ejemplo, las empresas de transportes urbano de pasajeros, que si no recibe apoyo no pueden trabajar», consideró. «Y ellos también para llegar hasta acá redujeron la cantidad de micros y recorridos, pero para seguir adelante y pensar en la posibilidad de una recuperación necesitan algún sustento. Entonces, la deduda de casi 100 mil millones de pesos que la CEC tiene con CAMMESA es un problema importante que afecta además al diseño de las políticas energéticas, es imposible pensar en una Concordia desarrollada o en crecimiento sin la base de un sistema eléctrico sustentable y capaz de solucionar la demanda de los contribuyentes», consideró.
Por eso, sin una refinanciación, sin una ayuda o si CAMMESA exige el pago, me pregunto: «Qué vamos a hacer? ¿Qué va a hacer el estado o Cammesa o el ministerio de Energía de la Nación que ahora está en la órbita del Ministerio de Economía? ¿Nos van a dejar de suministrar a nosotros y a muchos otros municipios del país porque debemos plata? ¿Van a hacernos juicios? La verdad es que no se qué va a pasar y entiendo que la situación es muy preocupante», concluyó.