
En primer lugar, Lago destacó que en este momento se debe respetar lo que decida el gobierno. “Evidentemente las decisiones que tomaron son las que nos vienen salvando”, dijo. “No podemos dejar de marcar que fueron muy acertadas las medidas”, añadió.
Más adelante, Lago destacó que el gobierno comenzó a exceptuar más actividades. “Evidentemente las que viene agregando son las que no tienen mucha afluencia de gente a las empresas o no tienen mostrador de atención al público. O sea que siguen viendo la manera preservar la salud. Es algo que no está mal: es algo que está muy bien sino en este caso estaríamos llorando por cuestiones familiares y no por nuestros negocios”, acotó.
Pero el gobierno analiza como comenzar a poner en marcha nuevamente la economía. En el caso de los comercios, sin abrir las puertas. En ese caso, se sustituye por otros canales como el teléfono, catálogos o Internet. “Obviamente que hay actividades que están muy marcadas por el criterio de Salud que son las de contacto directo entre personas que no pueden iniciarse”, remarcó Lago. Por ejemplo, peluquerías, odontólogos, kinesiología, etc.
Lago dijo que espera anuncios de aperturas parciales en estos días para que, al final de la cuarentena el 13 de abril, haya muchas actividades funcionando. Pero no como antes de que comience la misma. La intención de los comercios es que, día a día comiencen a abrir respetando las medidas de seguridad, higiene y profilaxis. Atendiendo de a uno o dos clientes, dependiendo del espacio físico existente. “Sin una atención generalizada”, explicó.
“Cada movimiento que hacemos es con el alcohol en gel, la disyuntiva del barbijo sí o no pero al día de hoy sirve porque, al usarlo de las dos partes, yo estoy cuidando al otro y el otro me cuida a mí, los trapos de lavandina en los ingresos”, etc. En cambio, lugares de aglomeración masiva seguirán cerrados. “Esto va a seguir así por un buen tiempo. Sino no sirve de nada todo lo que se hizo. Es lo que está pidiendo el gobierno y creo que es lo justo. Si ya hicimos el esfuerzo que hicimos hasta ahora, muchos estamos con los negocios cerrados pero contentos porque nadie de nuestras familias se enfermó. Tenemos que valorarlo y entender que se toma un riesgo al permitir que las actividades comiencen a funcionar”, sostuvo.
No obstante, Lago dijo que es consciente de que el arranque no será sencillo. De hecho, mencionó que las pocas actividades permitidas, como negocios de venta de alimentos, están trabajando “muy poco”. “Esos negocios que no querían cerrar a las 18 hoy ya están cerrando a las 18 y algunos al mediodía porque a la tarde no anda nadie”, dijo.
La falta de movimiento se debe pura y exclusivamente al daño económico que está provocando la cuarentena. Lago sostuvo que las decisiones que se adoptaron, bien fundadas para preservar la salud, no iban a ser neutras en lo económico. “Ese daño recién se empezó a sentir ahora y lo vamos a sentir bien dentro de un mes o un poco más cuando la mitad de ese 70 % de actividades que no pudieron abrir sus puertas no saben si van a poder retomar. De ese 70 %, un 40 % no tiene como pagar los sueldos, como pagar tributos, los servicios. No saben cómo van a poder arrancar y si arrancan no saben qué venta van a tener. Hay mucha incertidumbre”, remarcó.
Es un dominó: no hay dinero para pagar sueldos ni servicios ni impuestos. Eso genera baches en la recaudación de los impuestos nacionales, provinciales y municipales afectando la economía. Además, Lago sostuvo que todo está supeditado a que la curva de contagios y fallecimientos se mantenga estable para que no se vuelva a otra cuarentena total.
Llegado ese punto destacó la ausencia de casos de Covid 19 en Concordia, exceptuando el único importado, debido a las medidas extremas que se tomaron como el cierre total de la ciudad permitiendo un solo paso que se puso en discusión en estos días. “Creo que esto tuvo mucho que ver en que estamos como estamos. Estamos en 0 casos. Se hizo un control de verdad estricto de la entrada y salida de la ciudad. Si dentro de un mes y algo estamos iguales quiere decir que ya estamos exentos”, dijo aclarando que es la visión de un comerciante, no la de un médico.
Por otra parte, el gobierno nacional adoptó medidas para el sostenimiento de las pymes. Pero en Concordia no se ven reflejadas. Por ejemplo, mencionó que muy pocos comercios pueden acceder a algún tipo de crédito bancario. “Son inalcanzables”, indicó. “Hay que tener una carpeta en orden, al día, impecable, sin deudas”, recalcó. “Eso acá sabemos que es imposible: venimos de cuatro años donde se destruyó todo”, manifestó.
“Todo está dado para que se destruyan muchas cosas. La gente tiene muchos problemas con muchas cuestiones: sobretodo con el pago de los sueldos. Como pagar los alquileres”, dijo. El responsable del CICS sostuvo que salieron algunas normativas que fueron publicadas en el Boletín Oficial pero “no hay nadie que controle que se cumplan”.
De cualquier forma, en el CICS se resignan a que las medidas que se adopten de aquí en más seguirán vigentes por mucho tiempo. Sino basta con ver lo que sucede con países donde ya pasaron el pico de la pandemia y siguen las restricciones tanto en el comercio como en el movimiento de la gente general.