Al menos cuatro mujeres están encadenadas a pocos metros de la oficina privada del intendente de Paraná dentro del Palacio Municipal a la espera de una respuesta por su desvinculación como trabajadoras de la Municipalidad de Paraná.
Mientras tanto, otro grupo de excontratados de servicios y de obra, reclama cortando una mano de calle Corrientes, frente a la Comuna.
«Hace 8 días están reclamando y el señor Intendente hoy iba a darnos una respuesta, pero resulta que apagó los teléfonos», se quejó una trabajadora Sandra Godoy, quien acompaña a los despedidos.

Encadenados dentro del Municipio de Paraná
«Es una vergüenza lo que han hecho, una de estas mamás tiene un chico con leucemia. No tienen ni para pagar el alquiler, no para comer. Antes se respetaba el contrato de servicios, pero esta gestión no respeta más nada», afirmó la trabajadora.
Los manifestantes pertenecen según expresó a la dirección de Jardines Maternales, Cultura y diferentes unidades municipales, entre otras reparticiones.
El reclamo, adelantó, continuará hasta tanto consigan una contestación. Mientras tanto, esperaban a integrantes de la secretaría de Derechos Humanos de la provincia para «denunciar» la situación.