“No es casualidad que en las tapas de los diarios de hoy no se habla del submarino y del dolor de los familiares y del pueblo argentino que quiere saber la verdad respecto a esto. Se dejan de lado las cuestiones de los tarifazos que duelen en el bolsillo de los argentinos en diciembre. Acá hay una convivencia entre jueces federales y el Ejecutivo nacional”, dijo.
Las leyes que fueron enviadas al Congreso “van en contra de los intereses de los trabajadores, en contra de los intereses de los mayores adultos en la Argentina y también se quiere disimular el pacto fiscal que genera perjuicios para las provincias”.
“La ley que les mete la mano a los jubilados que el ciudadano la rechaza. Evidentemente que los pasos que ha dado el gobierno están absolutamente en contra de lo que la ciudadanía reclama”, indicó el legislador.
De todas formas, sostuvo a titulo personal que no va a votar “nunca en contra de los trabajadores” ni de otra que “les mete la mano en el bolsillo nada menos que a los jubilados”. Y añadió que la reforma producirá el desfinanciamiento del Anses. “Creo que la orientación es volver al sistema de las AFJP y dejar de lado el sistema previsional de reparto solidario”, dijo. De hecho, dijo que si alguna vez se lo describió al Congreso como una “escribanía”, el término puede ser utilizado hoy para lo que pasó en el Senado donde se aprobó con apuro y mínimas discusiones la reforma previsional.
Por ello, dijo que la noticia de la actuación de Bonadío apunta a dejar de lado el “tarifazo terrible a los combustibles y a la energía”. “Este es un gobierno absolutamente insensible que sólo le preocupa que las cuentas cierren y está trabajando para un país para pocos. Y no una Nación que incluya y que genere mayores derechos. Fíjense que la palabra reforma implica dar un paso hacia adelante y acá implica ir varios pasos para atrás”, dijo.
Solanas recordó que tanto Néstor como Cristina Kirchner pidieron justicia por el atentado a la Amia permanentemente en la ONU y en otros estrados internacionales. “Esto me parece que hay que recordarlo”, indicó.
De la misma forma, dijo que el juez federal Claudio Bonadío, además de ser uno de los jueces de la servilleta de (Carlos) Corach, ministro del Interior del ex presidente Carlos Menem, fue expulsado en 2005 por la Sala I de la Cámara Federal del Crimen en la investigación por el atentado a la Amia. Y enviaron los antecedentes de su decisión a la Comisión de Disciplina del Consejo de la Magistratura. Le reprocharon falta de imparcialidad y haber mantenido un doble rol de magistrado y sospechoso.
Asimismo, también recordó que en 2010, el fiscal Alberto Nisman denunció a Bonadío por una serie de amenazas que recibió a su cuenta de mail y que hacían referencia a la causa contra el magistrado por el encubrimiento del atentado a la AMIA.