Aunque este sistema de señalización, con banderas de colores amarillas, rojas y verdes, sólo funciona como un indicador de la concentración de algas, y no prohíben los baños en las playas.
Desde el Ejecutivo Municipal se aclaró que la medida de levantar la bandera roja no significó la clausura de la playa, ni la prohibición de los baños, y en este caso solo respondió al criterio del personal de guardavidas – capacitado por CARU como una manera de orientar a los bañistas – que al observar la coloración intensa del agua decidió levantar el banderín rojo, respondiendo a las indicaciones recomendadas durante la capacitación mencionada.
Pero aclaran además que de ninguna manera eso significó la clausura de la playa, según trascendió en algunos medios de comunicación.
Esta mañana, el mismo personal de guardavidas procedió a reemplazar el banderín rojo y en su lugar ya ha sido levantado el de color verde. A esta hora el balneario más concurrido de la ciudad, continúa con su funcionamiento normal, visitado por una gran cantidad de bañistas entre los que se encuentran mayoritariamente turistas.
