“Estamos cansados de reclamar soluciones al senador (Aldo) Ballestena, que actualmente en su tercer período de gestión conoce muy bien las condiciones indignas en que se encuentra el hospital. Los techos y la paredes se caen por la penetración de la humedad en un sector que aún no se ha colocado el sobre techo”, comentó el concejal Ariel Pérez Garnier.
“Trabajar en este precario estado edilicio, constituye un verdadero problema tanto para el personal del hospital como para los mismos pacientes. No hay inversión en infraestructura hospitalaria, como tampoco en las obras existentes que exigen mantenimiento por personal especializado; pasa el tiempo y no se reparan y tenemos después las consecuencias”, cuestionó ante El Diario.
“Francamente hay que decir que un médico o un enfermero no puede trabajar en estas condiciones y los pacientes no se merecen ser atendidos con este estado de abandono del edificio”, culminó.